𝗕𝗘 𝗧𝗛𝗘 𝗕𝗘𝗦𝗧! (𝗕𝗟𝗨𝗘 𝗟𝗢𝗖𝗞 𝗕𝗢𝗬𝗦)

𝗖𝗛𝗥𝗜𝗦 𝗣𝗥𝗜𝗡𝗖𝗘

Contexto: Chris literalmente: No me importa que usted sea mayor que yo.

Personaje: Chris Prince.

Inspirado en un bot de Character.ai.

¡Escenario!

Parte única.

‧₊˚Go! 

—¿Oíste hablar sobre los rumores entre nosotros dos? —Chris soltó una risita luego de decir eso, mientras rodeaba tus hombros con un brazo suyo.

Ambos son algo así como compañeros de modelaje habituales. Se ven muy bien juntos y eso vende; así que los ponen a posar juntos la mayoría de veces para muchísimas marcas.

Ahora, estando en uno de esos estudios para una revista, los dos estaban pacientemente esperando las instrucciones del director, quien acomodaba algo de la cámara y las luces.

—¿Qué tal si... hacemos realidad ese rumor? —coqueteó con una sonrisa felina, haciendo alusión a ese chisme tan hablado en Inglaterra.

Los titulares sobre ti y Chris no se trataba de su gran desempeño en las fotos ni en tu impecable presentación en cada pasarela. No, no. Claro que no.

Sino de que eras la "novia" o, por lo menos, affaire actual de tu gran amigo y compañero.

Vamos, ignorando completamente las diferencias entre ambos. Entre estos factores, sus edades.

—Espero firmemente que esta sea una de tus bromas, Chrissy —le diste una mirada inquisidora, sonriendo como si fuera un hecho su falta de seriedad al asunto.

Pero Prince, lejos de reír nuevamente, se puso un poco serio.

—Bueno, es hora de dar mi "es broma, pero si quieres no es broma" —sin embargo, es Chris, no dejará de bromear sobre la situación—. Pero, oye, hablo en serio.

—Yo también —le dijiste, prestando atención a lo que el director comenzó a indicarles.

Sus dos manos sosteniendo tu cintura mientras tu pierna derecha se ceñía a su cintura; tus manos se afianzaron en sus anchos hombros. Su rostro pegado al tuyo mientras sus cuerpos hacían una inclinación de casi trescientos sesenta grados en una postura de tango.

Luego, fueron cambiando, mientras fingían una coreo del mismo estilo para más naturalidad en la foto. Ciertamente, eran muy profesionales y se veían perfectos juntos.

—¿Ya acabamos? Bien, bien. Gracias, director —agradeció tu compañero mientras bebía un poco de agua—. ¿Adónde crees que vas, eh? Tenemos un tema pendiente tú y yo —se acercó rápidamente a ti cuando vio que intentabas abandonar la escena.

—¿En serio? Porque yo dudo mucho de eso... —te hiciste la tonta, jugando con tu cabello por los pequeños nervios.

La sonrisa que tenía en su rostro indicaba un plan perfectamente ideado por un psicópata enamorado como él. Lo conocías.

—Bueno, quizá podamos ir a beber algo y... charlar sobre eso.

Su ofrecimiento fue bien recibido por tu parte; así que juntos de retiraron del estudio saludando a los demás, quienes les enviaban miradas curiosas.