𝗕𝗘 𝗧𝗛𝗘 𝗕𝗘𝗦𝗧! (𝗕𝗟𝗨𝗘 𝗟𝗢𝗖𝗞 𝗕𝗢𝗬𝗦)

𝗟𝗔𝗩𝗜𝗡𝗛𝗢

Contexto: un pesado regreso a España.

Personaje: Lavinho.

Parte dos a pedido de varios.

‧₊˚Go!

En aquel cuarto de hotel el humo del cigarrillo nublaba tu vista. La pérdida de un amor tan único –como creíste y sentiste– desgarró aún más tu alma ya herida.

Jamás olvidarías aquella noche en el hotel más costoso de Brasil, descubriendo temores, destapando traumas y abriendo heridas que no sanarán fácilmente. El pensamiento de la insuficiencia se desplomó cuando la imagen de una familia perfectamente feliz regresó a tu mente; lo que habías destruido estaba siendo una tortura cada segundo.

Regresaste a España en poco tiempo y anunciaste, de forma muy repentina, unas vacaciones urgentes; todo el año sería sabático para pensar y cuestionarte numerosas cosas.

No hablaste con Lavinho de nuevo, ni él había puesto empeño en buscarte para nada. Simplemente se distanciaron y dieron, cada uno, por terminada la relación ilícita que llevaron a cabo.

Las salidas constantes con amigas fueron grandes colaboradores en el camuflaje de tu dolor. Cuando estalló la relación que Lavinho y su esposa tenían, salieron muchísimas personas a básicamente destruir tu carrera.

¿Por qué? Pues por meterte con un hombre casado y de familia, claro. Nunca será culpa del que ocultó su estado civil.

Para el ojo público, no fuiste más que una “robamaridos” por desconocer tu propio desconocimiento.

Poco después de salir a intentar dar tu versión de los hechos y ser cruelmente desdichada y tapada por quienes decidieron ver a la familia del futbolista como únicas víctimas en todo el embrollo, tuviste que hablar con Lavinho muy seriamente.

¿Qué ibas a decirle? “Te perseguí a Brasil y descubrí a tu familia allí, por eso me alejé.” ¿Acaso a él le importaba todo eso? Demostró no sentir cariño alguno por ti en todo este tiempo.

Pero aquí están, sentados uno frente al otro. En su hogar, qué lugar más peligroso para estar los dos solos.

―¿Por qué hiciste que mi familia salga a la luz, T/N? ―fue lo primero que preguntó, ganándose una confusa mirada de tu parte.

―¿Disculpa? Si tú no lograste esconderlos más de los paparazzi no es mi problema. Yo… ni siquiera sabía de ellos.

Pero tu ex pareja solo negó con una sonrisa maquiavélica.

―No intentes verme la cara de idiota, cariño ―se burló―. Yo sé que los descubriste. Mi amigo me llamó cuando te pusiste en contacto con él, y te pasó mi dirección porque yo se lo permití. Yo sé que me perseguiste a Brasil, y sé que nos viste.

¿Entonces todo esto es solo un macabro y morboso plan de su parte? ¿Con qué objetivo? ¿Su propio disfrute?

Tu rostro habrá sido el mayor poema del universo en aquel momento por su expresión. Estaba riéndose, riéndose de ti. Había jugado con el corazón de dos mujeres, e incluso de sus propios hijos.

¿Por qué? Querías preguntar, pero cuando la respuesta te da tanto temor, sólo quedas en silencio y esperas a que llegue sola.

Cuando la verdad es dolorosa, la mayoría preferimos callarnos y esperarla con sumisión, para fingir que no la esperábamos; lo que, irónicamente, duele muchísimo más.

―Es divertido, ¿sabes? Saber que hay dos mujeres preciosas esperando por ti en cada punta del mundo. Saber que hay dos mujeres que te adoran y que lo darían absolutamente todo por ti, ¿no crees? Imagínalo; tener a dos hombres hermosos, guapos y talentosos esperándote en casa para hacer el amor día y noche sin cesar, esperándote para mimarte por un día cansador y ajetreado…

―Oh, Dios santo, solo cállate. Das asco…

Su sonrisa lobuna solo se agrandó más cuando escuchó eso.

―Te encantaba cuando te decía todas esas palabras al oído cuando lo hacíamos, princesa ―susurró, acortando la distancia entre ambos.

De alguna u otra forma, acabaste entre sus brazos y acorralada contra la pared. No tenías escapatoria alguna en este momento, y una mente quebrantada y maltratada quedó a merced de la labia majestuosa de un hombre que bien sabía tentar a mujeres vulnerables.

Te podrás imaginar cómo terminó eso, ¿cierto? No llegaron a absolutamente nada, y solo perdiste el tiempo siendo llevada a su cama una vez más. Siendo su juguete sexual favorito del momento nuevamente.

Y lastimosamente para ti, la cantidad de agravios, violencias e insultos hacia tu persona sólo irán incrementándose, alimentándose entre sí hasta formar la bola de odio más grande del planeta; y todo esto en tu contra.

Ya saben que es su opinión la que vale, así que díganme qué les pareció.

En lo personal, no me gustó, pero x.