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"Uh, oh..."

Veía a su bebé reír mientras Natasha la ponía en el columpio que por fin habían puesto en el árbol, ambas se aseguraron de que esa rama sea totalmente resistente, así que ahora era seguro, el columpio tenía dos agujeros para meter las piernitas de Laia y que se sujete de la parte alta.

– Malysh... cuidado – Emitió Natasha cuando Wanda empezó a empujar el columpio

– Lo estoy haciendo suave – Dijo mientras escuchaban a Laia reír

– Debes ser más suave aún, es una bebé – Intervino de nuevo poniéndose al lado de su esposa

– Láska... está bien – Le restó importancia – A Laia le gusta la sensación y no la voy a empujar con fuerza como para que se caiga, es mi bebé también, sé cómo manejarlo

– No tienes porque hablarme así tampoco... – Se cruzó de brazos

– Nat – Rio levemente rodeando los brazos en su cintura, besando su mejilla repetidas veces mientras dejaba que su pequeña se balancee por sí sola – No te estoy hablando de ningún modo, sólo que a veces eres un poquito sobreprotectora con Laia

– No – Frunció el ceño sintiendo la boca de Wanda encima de la suya aunque no correspondía sus besos

– Sí – Rio levemente viéndola a los ojos – Láska... por favor – Dejó pequeños besos en su boca – Amor... – Tomó su labio inferior entre los suyos metiendo las manos debajo de su camiseta

– Wanda – Rio con suavidad tomándola de los brazos – Estamos en el patio con Laia ahí – La reprendió con suavidad

– Laia ni se entera, está entretenida moviendo sus pies para ver si se balancea más – Besó su cuello

– Amor.. estamos aquí para jugar con nuestra bebé

– Sí, malysh, pero, no hemos ni podido besarnos bien desde que amaneció...

– Desde que Laia aprendió a caminar y a despertarnos desde su cuna casi no hemos tenido tiempo a solas... – Le dio la razón juntando su frente a la de ella

– No... todo el día quiere que le prestemos atención...

– No sé a quién se parece... – Bromeó Natasha

– ¿Dices que a mí me gusta llamar la atención?

– Entre tú y Laia, no tengo tiempo ni para ir al baño, porque Laia es una bebé y tú te comportas como si ni siquiera te dirigiera la mirada...

– Claro que no – Se cruzó de brazos – Yo no..

– ¡Mamá! – Exclamó Laia interrumpiendo la conversación entre ellas

– ¿Quieres que te siga empujando, cariño? – Emitió Wanda acercándose a su bebé

– ¡Mamá! – Señaló a Natasha rebotando en el columpio

– Voy, Laia – Sonrió acercándose y empezando a balancearla de manera suave

Wanda rodeó a Natasha de la cintura y empezó a besar su mejilla.

– ¡Nooo! ¡Mamá! – Exclamó Laia de nuevo queriendo alcanzar a Wanda para que se aleje de Natasha

– Wanda, sabes que la enfada que no esté prestándole total atención a ella, es tiempo de Laia ¿De acuerdo?

Betrayed | ScarletWidowDonde viven las historias. Descúbrelo ahora