Betrayed | ScarletWidow

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"No vengas"

Volteó agotada, se llevó las manos a la cabeza cansada, caminó en dirección hacia su cama, veía apenas los primeros destellos del sol, se recostó fastidiada, ver a Wanda de manera tan vívida era desgastante y triste, la hundía más en su miseria, cerró los ojos intentando dormir, la luz del pasillo junto a la puerta abrirse la hizo sentarse preocupada.

– Hola, mi amor... – Sonrió Wanda entrando con Laia en brazos – Mi niña se despertó y no resistí traerla a la cama...

– Wanda – Dijo en un sollozo abrazándola cuando se sentó en la cama

– Nat... láska... ¿Qué sucede? – Besó su mejilla abrazándola por la cintura recostando a la bebé en su pecho

– Es que no sé porque apareces y desapareces... – La abrazó escondiendo el rostro en su cuello – Siento que ni siquiera esto está pasando y por más que estoy enojada contigo no quiero que te vayas o que no estés

– Pero aquí estoy, mi amor... – Besó su cabello mientras la abrazaba – Y de aquí no me iré más, nunca más, ahora sí lo nuestro es para siempre, las dos juntas con nuestra bebé y los demás que vengan

– ¿Qué pasó? – Se alejó viéndola a los ojos

– Nat... es muy tarde... hay que descansar...

– No, ahora... te desmayaste... y ¿Qué pasó?

– Me trajiste a la cama supongo porque cuando yo desperté tú estabas dormida al lado mío – Explicó tranquila acariciando su cabello

– Hagamos algo... – La vio a los ojos sintiéndose un poco más en control – Vas a abrazarme mientras contestas mis preguntas y si nos quedamos dormidas, no te vayas, despiértame tú o quédate a mi lado hasta que abra los ojos, porque no me gusta cuando estás aquí y desapareces

– No lo haré, mi Nat, ni siquiera iré al baño...

– Tampoco seas exagerada – Rio con suavidad juntando su frente a la de ella

– Te dejaré una nota si sucede entonces.. – Acarició su brazo conectando sus ojos con los de ella – ¿Es mucho pedir un beso?

– Claro que no – Se acercó a besarla de manera suave – También me muero por besar a mi esposa... – Susurró, empezó a besarla mientras posaba la mano en su muslo, Wanda correspondió sus labios dejando una mano en su mejilla, la emoción que compartían era tanta

Natasha se alejó de sus labios con suavidad, tomó la mano de Wanda que estaba en su rostro – Estoy demasiado confundida, tengo una mezcla de emociones gigante, te quiero cerca, conmigo, pero a la vez quiero gritarte y reclamarte, también me preocupa que estés herida y que te desmayes... sabes lo mucho que te amo y que para mí eres preciosa, pero no te ves bien, parece que no has comido en días y las marcas en tus brazos y tu cuello... ¿Por qué las tienes? – Acarició su muñeca

– En resumen... Agatha fue la que... me devolvió a la vida por decirlo de algún modo... no sé muy bien cómo explicarlo... pero al hacerlo nos unió en una especie de contrato en el que debía hacer lo que ella quería, si me rehusaba unos hilos aparecían y me herían, intenté escapar mil veces, pero no pude... y estos fueron los resultados – Señaló la marca que parecía un hilo rojo que rodeaba su muñeca de la mano que Natasha sostenía, no quería moverse, pues Laia estaba dormida en su pecho

– Ahora me siento peor de no haberte abrazado y besado cuando recién te vi – Tenía los ojos llenos de lágrimas

– No, mi amor.... – Juntó su frente a la de ella – Mi Natasha... no me importa, te entiendo totalmente, yo he fallado demasiado, y no me merecía ni el beneficio de la duda