Freen Chankimha
-¿A dónde vamos? -le pregunté a Rebecca.
-Realmente no tengo ni idea, solo quería salir de ahí. -contesto Rebecca mientras manejaba sin rumbo aparente.
-Pero era tú fiesta...
-No me importa lo único qué me importa eres tú...
-¿De verdad?
-Solo pasar un rato contigo es suficiente...
-¿Tomaste? -le pregunté al sentir el aroma a al alcohol, ella se tensó...
-Lo siento... se qué no te gusta... -se estaciono, no me había dado cuenta de cuánto recorrido hicimos, de pronto solo ví el mismo mirador del otro día.
-¿Nunca me ha gustado? -pregunté, cuando ella me abrió la puerta.
-Si, siempre te molestabas conmigo por tomar...
-¿Por qué?
-Decías qué era irresponsable cuándo lo hacía.
-¿Lo eras?
-Contigo no... posiblemente hacía unas locuras... pero estoy segura qué te agradaban esas locuras -dijo mientras sostuvo mi mano suavemente y me ayudó a bajar.
-Es hermoso... -hablé al mirar la hermosa vista, se podía ver toda la ciudad, las luces de los edificios y la luz de la luna se veían perfectamente...
-Se ve mejor de noche... -dijo, las dos estábamos sentadas encima del coche mirando a la hermosa ciudad.
-¿Me has traído aquí antes?
-No... lo descubrí cuándo ya no estabas conmigo. -contesto después de dudarlo un poco.
-Eso significa que es cómo una primera vez.
-Si, es la primera vez. -ella me miró con una hermosa sonrisa, me podía derretir con eso, solo empecé a reír, ella me miró confundida.
-Pensé qué ya habíamos vivido todo... -susurre, Becky me sujeto la mano suavemente.
-Vivimos muchas cosas, pero nos faltaron muchas más...
-Entonces me alegra saberlo... no me sentiré tan mal de pensar que capaz nunca te iba a sorprender. -ahora ella fue la que río.
-Siempre me vas a sorprender Freen...
-Ahora te estoy sorprendiendo.
-Cuando me besaste... -dijo, haciéndome sonrojar...
Carajo yo lo había hecho... yo... fui quién la besó...
-Me encanta cuando te sonrojas, te ves aún más hermosa de lo qué eres. -habló mientras acariciaba mi cara con una suavidad, me estremecí...
-¿Cómo nos conocimos?
-Oh... es curioso...
-No me digas qué fue vergonzoso.
-No para nada... ¿de verdad quieres saberlo?
-No se si ya te lo había dicho, pero quiero conocer también nuestro pasado...
-¿Quieres recordarlo?
-Si... es lo qué más quiero.
-Yo no tengo ningún problema para contarte, pero no quiero qué pienses que necesitas todos los recuerdos... podemos crear nuevos...
-Pero quiero hacerlo...
-Bien, bien... te contaré... -y empezó hablar, ella parecía feliz de recordarlo...
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Te amaré por siempre
RomanceRebecca Armstrong empresaria reconocida en todo su país, una persona qué perdió al amor de su vida, qué todo le parecía un infierno desde qué no la tenía a su lado. Una pequeña sonrisa la hizo tener un pequeño rayo de luz, un rayo de esperanza, y le...