Capítulo Dos: Pensando.

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Capítulo Dos

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Capítulo Dos.

" Pensando. "

La brisa se torno helada, mucho más fría enseñando el otoño que estaba sobre ellos, sobre el pueblo en donde creció y en donde ella también se fue. El cementerio no era muy visitado por sus habitantes y tampoco había personas que lo limpiaran, una de las razones que lo dejaba quedarse horas y horas ahí, con ella. Podía escuchar los latidos de su agitado corazón en sus oídos, pero su mente estaba solo concentrado en su imagen, se obligaba a recordarla, no deseaba olvidarla... Pero era difícil, sus recuerdos se hacían lejanos, borrosos en ocasiones, él creció y se propuso a recordarla siempre, pero su voz se hizo distante, su risa también y eso lo hacía querer enloquecer, deseo que estuviera viva, que alimentara su vida, nunca pudo decirle muchas cosas agradables y ahora se lamentaba. Cerró sus ojos con fuerza, su mente lo llevo a un momento que deseo perseverar, si se acercaba más a la orilla de la playa podía verla bailar en pleno atardecer sin su abrigo, estaba dando saltos, giros en el aire, sonriendo y moviendo su cabello, era tan hermosa que hacía que el espectáculo natural fuera algo secundario, sus suaves movimientos eran con delicadeza y esa entrega que la caracterizaba en todo lo que hacía. Ella bailaba frente a la luz naranja del atardecer, sus ojos brillaban con la intensidad de sus pasos, era como ver una aparición que no quiso dejar nunca, hasta que por un instante detuvo su baile, lo había visto y aunque seria normal que se avergonzara, su sonrisa aún brillaba y opacaba al sol, ella lo estaba viendo a él, su mano se levanto saludándolo con euforia, con alegria, como siempre era Bulma, no lo espero, de pronto ella con uno de sus arranques de inspiración corrió hacia él, podía verla casi en cámara lenta, se concentro en cada gesto, y adoro verla dar un salto digno de una bailarina de ballet profesional. Al aterrizar quedo a unos pasos suyos, no dudo en acercarse mucho más hasta estar frente suyo, tomó su mano que estaba cálida, atrayéndolo hacia su cuerpo.

El suelo estaba húmedo, habían pequeños charcos de lluvia que quedaron atrapados en suelo, de reojo logro ver el reflejo de la joven que al contrario del sentido común no los esquivaba, saltaba en ellos mojando sus tenis co alegría. Ella tiro de él con fuerza para que sostuviera su cintura con la mano que tomó, aún riendo encantadoramente lo obligo a bailar lentamente, guiando sus pasos como si fuera un vals, él se dejo llevar por su toque, su presencia y sus hipnotizadores ojos, tomando la valentía de hacerla girar para luego atrapar su torso con una de sus manos, haciendo que inclinara hacia costado como si estuviera planeado, como si ambos bailaran de toda la vida, ella estiro lentamente su mano hasta casi tocar el suelo con uno de sus dedos, sin pensarlo Vegeta los levanto a ambos lentamente sin soltarse, quedando de pie frente a frente. Siguieron bailando como si la música aún sonara, sus movimientos eran suaves y sincronizados, su espalda se pego a su pecho en donde él pudo aspirar su aroma, no era un niño, para nada, se veía a si mismo como un adulto. Logró escuchar su agitada respiración, — Vegeta... — la melodía lejana de su voz hizo presencia.

No era un recuerdo real, estaba torturándose con lo que deseo que pasara cuando la encontro bailando en ese entonces, él era un niño pero en ese momento supo que su pequeño corazón estaba palpitando con fuerza al verla danzar y ahora, en sus segundos de dolor su mente creo ese escenario, donde Bulma estaba en sus brazos luego de bailar, donde ella era un poco más pequeña y podía besar su cabeza, — ¿aún no me olvidas? — esa pregunta solo logró que él la estrechara más fuerte.

Midnight. || V.B ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora