Wish or death?

─ Part Twenty One ─

Hola, unas aclaraciones antes de iniciar con el capítulo, pido una disculpa por la desaparición pero me encontraba delicada de salud, tanto que casi me hospitalizan.

La historia sigue en rodaje común y corriente.

Ya determine un final para la historia.

Este capítulo contiene vocabulario obsceno, si no te gusta este tipo de contenido puedes simplemente no leerle y no comentar nada ya que eliminaré los comentarios que no sean de mi gusto.

También tendrán uncapítulo más extenso por todo el tiempo que estuve sin actualizar, será el siguiente que lo subiré el viernes.

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Narrador omnisciente

Tom no esperó su respuesta y se acercó a ella quien estaba nerviosa. Puso su mano en la parte posterior de su cuello guiando suavemente su rostro hacia ella mientras se inclinaba lentamente.— Quiero que me respondas cuando esté dentro de ti y no puedas rechazarme.— Le susurró Tom suavemente al oído antes de capturar sus labios con los suyos. Su delgado cuerpo se presionó contra el de ella mientras compartían un beso apasionado. Se agachó para acariciar su perfecto trasero a través de la tela que traía puesta la rubia.— Joder..— Continuaron besándose intensamente mientras Tom deslizaba expertamente una de sus manos dentro de las bragas de Alya, provocando su clítoris haciéndola gemir.

Tom entre abrió sus piernas alrededor de los muslos de Alya, él se acercó más a ella. Con la mano libre, él deslizó su pene duro y erecto dentro de ella con un movimiento rápido y fuerte mientras continuaban besándole.

La chica gimió de placer mientras su cuerpo se curvaba en respuesta a los movimientos que Tom hacía dentro de ella. Él continuó penetrándola con fuerza, deseoso de explorar todo su cuerpo después de tanto tiempo pasado desde la última vez.

Tom se sumergiría en la pasión del momento, disfrutando de cada gemido y murmullo que escuchaba desde el fondo de su boca. Sus brazos rodearon firmemente a Alya mientras él gimió de placer al unísono con ella.— Ah... — Su gemido llenó el aire mientras no paraba.

Él sonríe ligeramente mientras se ajustaba un poco más dentro de ella, haciendo que su movimiento sea más fuerte pero también más plácido. Sus manos seguían rodeando firmemente a Alya como si estuvieran dándole a entender que ella le pertenecia.— Ya había olvidado lo bien que se siente estar dentro de ti.— Susurra mientras la miraba directamente a los ojos con deseo posesivo.

El de trenzas apretó los senos de la rubia, suavizando la textura mientras pensaba que estos eran perfectos. Sus ojos brillaban con deseo mientras él seguía penetrándola en movimientos lentos y profundos.— ¿Y ahora que piensas? Podrías rechazarme, ¿Muñeca?—El susurro en la oreja de ella.

Sonriendo, el pelinegro deslizó una mano más abajo hasta tocar suavemente entre sus piernas y sentir la humedad que se acumulaba allí. Abrió un poco más las piernas de la chica mientras continuaba haciendo lo suyo con fuerza, apretando su cuerpo contra el de ella.—¿Podrías hacerlo más despacio?— Le dijo Alya en medio del ruido que provocaban sus cuerpos al chocarse.— Ni en broma, te follaré tan duro que no tendrás que caminar para el día de mañana.— Contesto él con una sonrisa burlona.

Alya ascendió y se inclinó hacia atrás, presentando su garganta perfectamente. Tom la besó profundamente mientras seguía penetrándola con un movimiento rápido e incesante que la estaba consumiendo poco a poco.— Me encanta tenerte así... Rogando para que vaya más despacio.— El murmullo del hombre llegaba de sus labios entreabiertos antes de levantar el volumen para jadear.