LA MIRADA DEL CUERVO

Capitulo 7 - Juego de Sobrevivientes

Narra Andrew

-Ya quita esa cara, desde que llegaste no has querido comer nada – se sienta al lado de mi – Habel chiquito, ¿que tene? – pellizca mi mejilla.

- Hay no seas payaso – le doy un coscorrón.

- Oph! – se carcajea el imbécil – Por favor, es muy raro verte con esa cara.

- ¿Cuál cara?

- Hermano, técnicamente tu siempre llegas con tu expresión seria de querer matar a alguien o un peor cuando la historia de tus posibles víctimas te afecta – me cierra la pantalla de mi laptop – pero esa cara de confusión es preocupante.

- No es nada, ponte a trabajar – ruedo los ojos.

- Andrew, ¿Es por una chica? – desvió la mirada a la ventana – Oh si lo es, el cuervo se volvió paloma.

- Cierra la boca, no es nada de eso – muerdo mi lengua – Solo dame algo, necesito desestresarme.

- No a mi no me engañas, ya suelta la sopa – me sirve un trago, y pone sus manos bajo la barbilla mirándome pícaro.

Andrew podría negarse a decir algo, pero lo conocía a la perfección, ambos habían iniciado en ese negocio de asesinos desde muy jóvenes, Don se encargó de entrenarlo a Thomas y a él, dándoles una crianza ajena a la de sus familias, juntos eran uña y mugre, ambos son un dúo implacable ya que se conocen al derecho y al rebes.

-Tomas – toma su trago – sabes que jamás me ha interesado el contacto físico con alguien.

- Además del sexo que tienes con cualquiera que se te cruce, no se de que tipo de contacto me hablas – se cruza de brazos.

-Ayer que acompañé a una conocida de Dona, luche con unos tipos molestos, vaya me divertí el idiota salió despavorido con sus perros – juega con el vaso, notando la mirada seria de Tomas – El punto es que, Sofia, así se llama la chica, me toco de una manera que no sé cómo explicar.

- ¿Te toco? ¿Te violo o qué?

- No idiota – le doy un zape para después retrancarme en el respaldo de la silla – me tomo de las mejillas, las acaricio, su mirada compasiva me mantuvo paralizado un momento, por primera vez en estos años, me sentí...

- ¿Enamorado? – lo miro molesto – Hay bueno, por la forma en que lo dices, se da a entender de esa forma, entonces ¿te sentías...?

- Asustado – finalizo.

- Creo que es comprensible, digo, después de que el compromiso no esta en tus planes, es lo más seguro que te la folles para olvidar ese "susto" – hace un ademan con las manos - ¿no?

- No, tiene demasiados problemas como para involucrarse con alguien estos momentos – doy el ultimo trago – Su madre enferma ya le da suficiente martirio.

- Mira nada mas, ambos viven para una mujer mayor, tienen algo en común – enrreda sus dedos formando un corazón – ¿será el momento de cumplir con el testamento de Don?

- No eso jamás pasara, mi palabra es clara.

- Su hijo puede demandarte por no cumplir hermano y será un escándalo – rueda los ojos.

-Que lo haga, de todas formas, si no sabe a quién demandar no tiene por qué, ya tomare le puesto como se debe, a su tiempo.

No puedo perder lo que Don me dio con su alma, sabía que su familia solo acabaría con el imperio que formo detrás de la ley, en uno de los puntos de su testamento dejo a mi nombre el dinero, territorios y bienes físicos, más negocios que debía seguir con sus socios, pero solo había aceptado con una condición, que quedaría anónimo mi nombramiento, hasta que yo reportara quien era el nuevo sucesor de Don Lennon y solo pasaría cuando toda la ciudad fuese mía.