Secret Love pero... [BAKUTOGA]

2.7

-¡Papá, papá, papá!-Gritó Emma.

Bakugo suspiró y la miró.

-¡Kota me está molestando!
-¿Con qué?
-¡Le digo que no meta la pelota en la piscina y no me hace caso!
-Emma... Es solo una pelota...
-¡Pero me molesta!

Bakugo suspiró de nuevo y se levantó dejando su móvil sobre la mesita. Salió al jardín detrás de la niña y miró a Kota.

-Kota... ¿Puedes sacar la pelota de la piscina..?
-Pero papá Emma-
-Kota porfavor... Ya sabes cómo es tu hermana...

Kota frunció el ceño agarrando la pelota y se la tiró a la niña a la cara haciéndola caer de espaldas.

-¡Kota!-Gritó el rubio agachándose para ver qué la niña estuviera bien.
-¡Siempre hacéis lo que dice Emma!-Se quejó saliendo del agua de mala gana.

Bakugo se quedó callado y lo vio irse. Volvió a mirar a la niña que en su cara se empezaba a notar la forma de la bola por el golpe. Apretó los labios para no reírse y la agarró en brazos.

-No te ha hecho nada, ¿por qué eres así con tu hermano?
-¡Me molestaba la pelota!

Rodó los ojos y la dejó en el suelo para ver cómo se iba al agua otra vez. Fue a buscar al niño que se había encerrado en su habitación y llamó a la puerta.

-Kota, ¿puedo entrar?

Este no respondió y Bakugo abrió la puerta. Le daba la espalda sentado en su cama y se acercó a él cerrando la puerta.

-Kota... Ya sabes cómo es tu hermana...

Este no respondió y Bakugo se sentó a su lado viendo como este se limpiaba la cara y la apartaba evitando que este le viera.

-No digo que hagas lo que ella diga, pero tampoco puedes molestarla a posta...
-No intentaba molestarla, cuando me dijo que le molestaba la pelota me alejé, pero seguía diciendo que la quitase
-Pues en vez de pelearte con ella me lo dices a mí o a mamá, según quién esté en ese momento

Kota suspiró y miró a su padre.

-Ella estaba metiendo la colchoneta, que es más grande solo para molestarme, y me pegaba con el churro en la cabeza
-¿Y por qué no me lo has dicho cuando lo ha hecho?
-Porque no quería que se pusiera a llorar...
-Cada vez que tu hermana haga algo que te moleste me lo dices, da igual si llora, ella llora por todo para que le hagamos caso, ¿crees que no me he dado cuenta de que tu hermana es una exagerada?

Kota se rió y asintió.

-Pues ya está, venga, vete a la piscina otra vez, ahora hablaré con ella también y se va a enterar

Bakugo se levantó y Kota lo siguió. Cuando llegaron al jardín Bakugo frunció el ceño mientras corría hacia la piscina.

-¡Cómo te digo que no te vayas a lo hondo!-Gritó.
-Pero no me hundo, llevo los manguitos
-¡Me da igual! ¡Tenéis prohibido iros a lo hondo y lo sabes! ¡Sal del agua ahora mismo!
-¡No!
-¡Emma! ¡No me hagas meterme!
-¡Noo!
-¡Pues sal ahora mismo!
-¡Que no!

Este se quitó los zapatos de estar por casa dejándolos a un lado y se tiró al agua con la ropa puesta.

-¡Ah! ¡No papá! ¡Déjame estar aquí!-Gritó la niña moviendo los brazos intentando nadar para alejarse de él.
-¡Te avisé Emma!

Se acercó a ella y la agarró del brazo.

-¡Se acabó la piscina para tí mocosa!
-¡¡Noo!!-Gritó la niña a punto de empezar un berrinche.

Bakugo la sacó del agua y esta se tiró al suelo pataleando y chillando.

-¡Callate!-Gritó este saliendo del agua.