Secret Love pero... [BAKUTOGA]

2.8

La luz blanca deslumbraba sus ojos y un punzante dolor en su abdomen la terminó despertando por completo haciendo que se incorporase en la cama de golpe.

-¡Toga! Joder...

La rubia lo miró mientras este la abrazó con fuerza y se sorprendió.

-¿¡Por qué no me avisaste de la situación a mi!?-Preguntó mientras apretaba con fuerza la camiseta se la rubia.
-Katsuki...
-¡Tuvieron que reanimarte dos veces!

La rubia se sorprendió y miró sus manos, estaban llenas de arañazos. Miró al rubio de nuevo y sonrió.

-Pero estoy aquí-Dijo esta.

Bakugo besó su frente y volvió a abrazarla.

-En mi único día libre a la semana y casi me das un infarto...

Toga se rió y acarició su mejilla.

-¿Que pasó al final?-Preguntó esta apartando la mirada.
-Conseguimos detenerlos a todos, revisamos todo y los pocos que quedaron vivos están ya en prisión

La rubia asintió y miró por la ventana.

-¿Emma y Kota están en el colegio?
-Si, hace un rato que he llegado de allí, estaban preocupados
-¿Cuántos días llevo fuera?
-Desde ayer, cuando te apuñaló
-Entonces no es tanto
-No, tuvieron que operarte de urgencia, te habia dañado algunos órganos, pero pudieron operarte a tiempo...

La rubia se quedó en silencio y bajó la cabeza apretando los dientes.

-Katsuki... Yo no quiero seguir con esto...
-Estás en todo tu derecho...
-No quiero vivir sabiendo que montones de personas desean matarme... Que en cuanto salgan de prisión es lo primero que intentarán... Buscar a quien les arruinó la vida... Y matarlo... En este caso, a mí...

Bakugo no dijo nada miró cómo se escurrían las lágrimas por la mejilla de la rubia e hizo que lo mirase.

-Himiko... Habla con Nezu...-Dijo este.

Le sorprendió que por primera vez la llamase por su nombre y sólo hizo aumentar su llanto.

-No quiero dejarte sólo, ni a tí, ni a los niños Katsuki...
-Lo sé...
—Pero... No hablaré con Nezu...

Bakugo se quedó callado y esta sonrió levemente.

—Podré trabajar contigo, eso me hace sentir segura

Bakugo suspiró y acarició su mejilla.

—No estoy de acuerdo con tu decisión, pero tú podrías no estar de acuerdo con que yo sea un héroe porque pueda morir, por eso te dejaré seguir en ello... Pero intenta que no vuelva a pasar...
—He perdido mucha agilidad después del parto Katsuki... Y ya no tengo 18 años
—Ni que tuvieras 80
—Lo se, pero no es lo mismo que antes
—Solo tienes que entrenar un poco y mejorarás de nuevo

Toga asintió y acarició su pelo. Nezu entró a la sala y la miró sonriendo.

—Me alegra que ya estés bien
—Gracias
—Gracias a tí, todos los de esa organización están en prisión, el líder obiamente no saldrá y hablaré para que el resto tampoco

Toga asintió y Nezu poco después se fue.

—Hoy le tocaba a Kota quedarse en casa de Kirishima, ¿cierto?
—Si, yo recogeré a Emma y Kirishima recogerá a su hijo y a Kota
—Me gustaría ir a mí
—Tienes que guardar reposo, además, no sé si saldrás de aquí para cuando a ellos les toque volver a casa

Toga suspiró y el médico entró a la sala.

—Ah, que bien, ya estás despierta

Ambos rubios miraron al médico y este se acercó sonriendo.