unCORRECTED

Volver a verte

Blyke

Estaba perdido en mis pensamientos hasta que cada bello de mi cuerpo erizo, tranquilamente me di la vuelta hasta que en un rayo azul alguien había aparecido, y con ella 3 personas más habían llegado a la habitación.

-¿Lo encontraste?- Ojos ámbar brillantes miraban en mi dirección, se había vuelto increíblemente poderosa.

-¿Dónde está?- Aquella voz serena pero demandante de la defensa misma preguntaba con incertidumbre.

-No esta muy lejos de aquí, pero debemos llegar rápido, esta en problemas, puede que incluso luchando todos juntos ni así podamos traerlo de regreso- La serenidad en mi voz preocupo a los demás.

-Vámonos- Finalmente había vuelto a aparecer, a lo cual simplemente asentí.

John... aguanta un poco más, esta vez me corresponde devolverte el favor amigo... Esta vez era el momento de salvarte incluso si significaba de ti mismo.

Con rapidez nos dirigíamos hacia la salida de aquella escuela que tanto sufrimiento nos había provocado, pero también la única donde podríamos recargar nuestros problemas y sentir que éramos aceptados pece a las acciones cometidas.

Mientras nos movíamos por aquellos largos pasillos una fuerza inmaterial nos había sujeto al suelo, piernas y brazos atados por la gravedad -no tienen permitido abandonar esta escuela- con serenidad, pero demandante voz nos detuvo a mitad del camino.

-Usted no tiene la autoridad para decirnos que debemos hacer con nuestras vida- tan pronto como mencione aquellas palabras mi cara topo contra el suelo, -es cierto, pero aquí es mi deber mantener su seguridad- con resonantes pasos se acercaba a mí, aquella persona a la que tanto admiraba no solo por su poder, si no por aquellas cualidades que hacen a un líder, el director.

-Tenemos que ayudarlo- esta vez no fui yo quien hablo -Ustedes no deberían masticar mas de lo que pueden morder- su semblante tranquilo se volvió una mezcla de autoridad y seriedad. -Es cierto, sin embargo, también debería saber que ya no tiene el poder suficiente para detenernos director- Seraphina había desaparecido en con su habilidad posicionándose detrás de el sorprendiéndolo.

-Han crecido mucho, realmente estoy orgulloso de ustedes jóvenes- Por primera vez desde que lo conozco este hombre había sonreído y lo había hecho de una manera genuina así desapareciendo la presión que nos ataba a la tierra.

-Sálvenlo-

John

No pensaba que nuestro rencuentro fuera de esta forma, siempre había soñado con conocerte, con poder oír tu bella voz y sin embargo, aquí estabas, frente a mi dando tu mejor esfuerzo para matarme, que inesperado giro nos da la vida ¿no es así madre? Pero quien seria yo si me rindiese ahora mismo.

Mis brazos temblaban mientras que mis piernas no podían ni levantarse y aun así me empeñe en crear una barrera a mi alrededor, una que posiblemente no me salvaría de toda esa aura que estabas acumulando, pero me daría tiempo para pensar, pero... si no existiera quizás volverías a estar con papa, si no existiese quizás serian felices...

Lentamente me levante haciendo desaparecer aquella barrera que me protegía de ti. Y así mismo extendí mis brazos al aire -Te amo mamá- aquellas palabras que siempre había soñado pronunciar por fin lo había logrado, quizás no fui hecho para salvarte, pero si para recordarte y lo agradezco.

Entonces el ataque se disparó a máxima velocidad hacia mi y por un momento pude ver lagrimas correr por tus ojos, me habías recordado, lastima que esta seria la primera vez y la última que permaneceríamos juntos.

Con tranquilidad cerré mis ojos mientras esperaba mi inevitable destino.

-Se fuerte hijo mío- Anonadado volví a abrirlos solo para ver como aquella energía blanca atravesaba el corazón de mi padre, él me había salvado.

-Perdóname... hijo-