Capitulo 23

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Adrien

Ya había llegado a mi casa y como había indicado mi doctor me debía mantener en casa, algo que llegaba a ser estresante. Pero siempre me contentaba al ver a Luka, Louis o hasta Natalie que me venían hacer compañía.

– ¡Hola! – voltee hacia la puerta notando a Luka.

– Hola ya llegaste ¿Como te fue? –.

– Muy bien, es muy tranquilo trabajar en tu empresa y fácil de adaptar –.

– Si, siempre trato a mis empleados como mis amigos –.

– Me gusta el ambiente laboral que tienes – ambos nos quedamos viendo y sonreimos – ¿Que hay de ti? ¿Como te fue?.

– Preguntas como si fuera interesante mi dia jajajaaj –.

– Que tal y si jajajaja – reímos los dos pero sólo nos quedabamos viendo, era otra vez esa tensión entre nosotros.

Nos interrumpió el sonido de los truenos y la lluvia, Luka se asomó y vimos que había tormenta.

– Ya lo bueno que hara frío – dijo.

– Si la verdad –.

– Ire a darme un baño y a cambiarme no aguanto el traje –.

– Ok, yo seguiré aquí como todo el día – volvimos a reír y él se fue.

Luka me hacía pensar muchas cosas y realmente sentía cosas por él, aunque no me definía como tal, sabía que él me gustaba mucho.

•••

Paso un rato y decidí ponerme a leer un poco para distraerme, hasta que oí como Luka entraba.

– ¿Ya listo? –.

– Si, sólo vine a ver si no necesitabas algo –.

– Aaammm...creo que no –.

– De acuerdo, nos vemos en mañana – él estaba apunto de irse hasta que se me ocurrió una idea genial.

– ¡Espera! – volvió asomarse – ¿No quieres quedarte esta noche... aquí conmigo?.

Vi como su expresión cambiaba y sonreía, abrió la puerta por completo y entro, se acostó a un lado de mi cama y sólo nos quedamos viendo.

– ¿Estas seguro? – preguntó.

– Claro que si, quiero que estés aquí –.

Luka

Mientras él leía yo revisaba mi celular, la tormenta seguía y cada vez más fuerte, pero la tensión entre nosotros eran mil veces más, estaba muy nervioso estar a su lado y más que me lo había pedido.
Todo estaba bien hasta que un fuerte trueno hizo que las luces se apagarán, quedándonos sin luz.

– No puede ser – dijo él.

– ¿No tienes luces de emergencia? –.

– No, porque se supone nunca se va –.

– Pues deberías tenerlas jajajaja – prendí la lámpara de mi celular y trate de ver que podía hacer.

– Luka déjalo, mañana regresa –.

Estábamos los dos viendo la tormenta, ya que Adrien no podía leer sin luz y yo no podía revisar mi celular porque no habia wi-fi veíamos la tormenta.

– Esta hermosa la noche – dijo él lo que me hizo tener fuerzas para acercarme más a él.

Toque su hombro con mi mano y empece a acariciarlo para luego darle besos.

– No más que tú – seguí dándole besos hasta su cuello.

– Luka – susurró –.

Sentí como él se volteo y aunque no nos podíamos ver lograbamos dislumbrarnos por la luz que tenían los truenos, él acaricio mi mejilla y me acerque a besarlo, un beso tan apasionado que nos hacia olvidarnos de todo aparte de que ya lo necesitábamos.

Decidí intensificar el asunto, pase mis besos por su cuello y él acariciaba cada parte de mi rostro lo que me volvía loco.

Volví a sus labios y seguimos besándonos, definitivamente no íbamos a parar.

No fue hasta que la luz volvió que ambos nos percatamos y en cuanto eso paso, nos separamos de inmediato y nos pusimos tímidos.

– Ahh...lo lamento – dije.

– Tranquilo, yo empecé –.

Nos quedamos callados y aunque ya nos habíamos besado antes, esto era nuevo para él y debía ir con calma.

Continuará...


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