Capitulo 12

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Luka

A la mañana siguiente los ruidos de algo me despertaron, ¿que estaba sucediendo afuera?, me levante, fui al baño y salí de la habitación hasta abajo notando a Adrien en la cocina.

– ¡Hola! Ya despertaste, ven a sentarte –.

– Buenos dias, me despertaron unos ruidos –.

– A si, es mi hijo con sus juguetes ¡Louis! – se oyó a lo lejos como venía corriendo.

– Ya estoy aca papá –.

– Saluda hijo –.

– Hola señor –.

– Hola Louis, que gusto conocerte –.

– Igualmente señor, ¿Quiere jugar? –.

– Claro que si –.

Louis me jalo hasta la sala que estaba enfrente de la cocina donde Adrien podía vernos.

Me dio un dinosaurio de juguete y ambos empezamos a jugar, Louis era un niño tan hermoso y tranquilo, era idéntico a su padre.

Adrien

En lo que yo cocinaba el desayuno, Luka se puso a jugar con mi hijo lo que fue una salvación porque yo no podía hacerlo por estar cocinando, pero gracias a él se entretenía. En cuanto termine de la cocina me fui a la sala para decirles pero me quede un momento viendo a los dos jugar, era tan hermoso ese momento que saque mi celular y les tome una foto, quería tener guardado ese momento, se sentía como un momento en familia y eso éramos, una familia.

– A desayunar –.

De reojo vi como Luka cargaba a Louis hasta su asiento de bebé, como todo un padre.

– Se te da lo de ser papá, ¿No te gustaría uno? – pregunté.

– Jajajaja claro que si, pero ¿Como? Los hombres no nos embarazamos –.

– Adopta –.

– Es un proceso largo, yo digo que si lo haría pero con la persona indicada – ambos volteamos a vernos y el me sonrió de una manera tan carismática que me puso nervioso.

– Papá ¿Hoy podemos ir al parque? Es fin de semana, anda, di que si –.

– Pregúntale a Luka, él es el jefe – bromeé.

– Señor ¿puede dejar ir a mi papá al parque? –.

– Claro que si y dile que te lleve a donde quiera –.

– Siiiii –.

– Primero termina de desayunar y ya luego nos vamos –.

– Si papá –.

– Deberías acompañarnos Luka –.

– No quiero molestar –.

– No es ninguna molestia, nos vamos a divertir mucho –.

– Pues si el jefe Louis dice que si, yo voy –.

– ¿Que dices Louis? ¿Que vaya Luka? –.

– Si papi, para que se suba contigo a la montaña rusa –.

Todos empezamos a reír y seguimos desayunando, hace tiempo que no teníamos un desayuno asi y no me mal entienda trato siempre de hacerlo divertido para mi hijo, pero aún así falta el calor de una madre y aunque no pueda estar Luka es de mucha ayuda.

•••

Ya estábamos en el parque, Louis andaba de aquí para allá, cada juego de que veía se subía, era un loquillo.

– Papi ¿puedo ir a la arena? –.

– Pero te vas a ensuciar todo –.

– Andale papi –.

– No quieres ir mejor a la piscina de pelotas –.

– Esta bien –.

– Es súper obediente – dijo Luka.

– A veces, luego hace sus berrinches, pero siempre trato de explicarle el porque –.

– Eso es una buena educación –.

– Trato de ser buen padre –.

– Eres un gran padre, le das todo a tu hijo y tiene una gran educación –.

– Si, pero siento que no es suficiente –.

– ¿A que te refieres? –.

Me quede pensando un rato en si decirle o no, no nos conocíamos mucho pero ya lo consideraba un amigo.

– Recuerdas cuando me preguntaste sobre mi esposa –.

– Si...pero no tenemos que hablar de eso si no quieres –.

– Quiero hacerlo – voltee a verlo – Desde que nació Louis todo fue hermoso, realmente hermoso, una buena vida, una buena familia, increíble todo, nunca hubo problemas, no discutíamos ni nada, éramos la pareja perfecta, hace un año mi esposa cambio totalmente...dejo de ser la misma, se enojaba rápido, no quería comer, se pasaba encerrada, dejo de trabajar, muchas cosas y trate se hablar con ella, buscar una solución pero ella nunca habló conmigo asi que...deje de intentarlo – no pude evitar sacar una lágrima.

– Si no quieres continuar tranquilo, sólo respira –.

– Estoy bien...un dia estaba trabajando y me llamó mi suegra diciendo que fuera al hospital porque le había pasado algo a mi esposa, cuando llegue me dijo que ella se habia tomado todo el frasco de píldoras que le había recetado en doctor, sus antidepresivos – respire hondo.

– Osea que, ¿ella murió? –.

– No nada de eso, le hicieron un lavado estomacal para ayudarla y cuando la fui a ver ella me pedía, me rogaba que ya acabará con su sufrimiento, que ya no quería estar ahí, que se quería ir y no pude verla en ese estado...asi que llame a un centro psiquiátrico para poder intentarla ahi y que la ayudarán a salir de su sufrimiento, claramente ella se enojó y no lo acepto. Ahorita está ahí en el centro y no ha dicho nada, no quiere sanar se rehusa a hablar con los médicos y solamente se quiere suicidar –.

– ¿Nunca intentaste averiguar que sucedía? –.

– Lo intente, pero no había nada de pistas, asi que sólo lo deje –.

– No fue tu culpa, ella tomo sus decisiones y no debes sentirte culpable por intentar ayudarla. Ella en algún punto va hablar y contara que le sucede –.

– Eso espero, porque la extraño mucho y Louis igual. No quiero que crezca sin una madre –.

– ¿Él sabe donde esta su mamá? –.

– Le dije que ella se había ido y que no sabía cuando volvería...eso fue hace unos meses y ya dejo de preguntarme –.

– Él estara bien, cuando tenga la suficiente edad entenderá lo que sucedió –.

– Si, aunque debo decir que...hoy tu me ayudaste –.

– ¿En que? –.

– Volviste a dar vida a mi hogar, el que juegues con mi hijo, desayunes con nosotros y nos acompañes al parque, es como si fuéramos una familia otra vez –.

Vi como sonreía y no pudo ocultar sus lagrimas.

– Gracias Adrien –.

Me acerque para darle un abrazo.

– Gracias a ti –.

Continuará...

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