Baby Sunghoon [Minlix]

22

—¡¿Sunghoon ya estás listo?!— Gritó Felix desde la cocina, estaba preparándole su lonche a Sunghoon.

—¡Si mami!— Gritó Sunghoon, este bajó las escaleras corriendo hasta la cocina, y le dio la mochila a Felix para que guardara la lonchera.

—Estas muy feliz hoy, ¿Hay algo especial?—

_Lo sabrás cuando salgamos mami.— Felix cerró la mochila y tomó la suya, caminó con Sunghoon de la mano hasta la puerta. Bajó con normalidad hasta llegar a la entrada de la residencia, ahora sabía de que hablaba Sunghoon. Minho  estaba recargado en su coche esperándolos. Sunghoon gritó escandalosamente soltandose de la mano de Felix, para correr y abrazar al alfa, y este lo cargo gustoso.

—¿Qué haces aquí?—

—De alguna u otra forma me tengo que meter a sus vidas y llevándolos a la escuela me parece una muy buena. Sube o se hará tarde.— Le guiño y dió la vuelta aún con Sunghoon en brazos, abrió la puerta atrás del piloto y puso a Sunghoon en la silla especial que había comprado esa misma mañana. Felix ignoró el hecho de que se quiso lanzar a abrazar al alfa y se subió al carro, no tenía ganas de pelear.

—Estas tomando muchos supresores.— Dijo Minho ya en el carro, Felix miraba por la ventana y Sunghoon jugaba con el peluche que le compro Minho.

—Tengo que, mi celo podría explotar otra vez.—

—No los necesitas, ahora yo estoy contigo, solo dime y hago que Sunghoon pase una tarde con sus abuelos.— Las mejillas de Felix se encendieron y Minho lo notó, también notó como él omega retenía la sonrisa que quería aparecer en sus labios.

—Idiota.— Murmuró.

—¿Mis abuelos vendrán?— Preguntó Sunghoon con alegría, tanto el alfa como el omega se quedaron congelados.

—Tus abuelos vendrán hasta navidad mi amor.— Sunghoon bajo su cabecita un poco triste.

—Pero si quieres te puedo llevar a conocer a tus otros abuelos.— Dijo Minho.

—¿Tengo otros abuelos?—

—Ay, mira ya llegamos.— Felix bajó del carro y Minho igual, este bajo a Sunghoon y lo acompañaron a la entrada.

—Portate bien Sunghoon, te quiero.—  Felix abrazó a su hijo y le dió un beso en su mejilla, Minho se inclino hasta estar a la altura de Sunoo.

—Tu mamá y yo vendremos por ti más tarde e iremos a comer helado, ¿Te parece?— A Sunghoon le brillaron los ojos.

—¡Si!, ¿Voy a poder comer nieve de chocomenta?—

—Claro, todo el que tu quieras, te
quiero.— Felix sabía que las palabras del alfa eran sinceras, pues a pesar de tener poco tiempo viendo a Sunghoon, el realmente lo quería. Vieron como Sunghoon entró a la escuela con Sunoo, acababa de llegar. Lo bueno es que Kai no dijo nada cuando los vió juntos, pues ya sospechaba.

Minho y Felix iban de camino a la universidad.

—¿Por qué le dijiste que iremos a comer helado?—

—Porque eso haremos, sin tu permiso pedí permiso para que faltaras.—

—No puedes hacer eso sin
consultarme.—

—¿Estas enojado?—

—No, sólo dime lo que vayas a hacer.—  Llegaron a la universidad y Felix se bajó y entró directo sin despedirse.