Baby Sunghoon [Minlix]

08

Estaba apunto de terminar su última clase y así poder ir a trabajar.

—El profesor de literatura me da
sueño.— Dijo Jisung bostezando.

—A mi igual.—

—Bueno jóvenes, eso es todo por hoy pueden irse.— Antes de que el pobre terminará ya se habían ido todos.

Jisung y Felix se dirigían a la salida donde los esperaban Hyunjin y Seungmin.

—¡Hey por aquí!—

—¿Cómo les fue?—

—Bien hyung.— Hyunjin asintió. —Oigan chicos, les molesta que invite a Jeon...—

—No... digo, termina por favor.—

—Jeongin.— Jisung y Hyunjin se estaban riendo por lo indiscreto que había sido Seungmin al no dejar que Felix terminará de hablar.

—No nos molesta Lixie, bueno por lo menos a Seungmin no.— Y Jisung río aún más fuerte que se tuvo que agarrar la panza, mientras que Minnie estaba todo sonrojado.

—Idiotas.—

—JAJAJAJAJAJAJA— La gente ya los estaba viendo raro y más a Jisung que parecía foca ahogándose.

—Bueno me voy, no quiero llegar
tarde.—

—Claro Lixie, te vemos en la tarde.—

Durante el camino a la escuela de Sunghoon pudo sentir a su lobo más inquieto, toda la mañana lo había estado aguantando. Ya una vez dentro de la escuela fue directo a su salón para poder dejar sus cosas.

Los niños ya se encontraban sentados esperándolo.

—¿Qué quieren hacer hoy?—

—¡Pintar!— Gritaron todos lo niños.

—Bueno, Sunghoon ayúdame a entregar estas hojas a tus compañeros.—

—Si mami.—

Ya eran las cinco y media, Felix estaba en la entrada, pues hoy le tocaba a él entregar a los niños.

—Sunghoon ve a buscar a tu tío Jeongin, no quiero que se nos haga tarde.— Sunghoon asintió y fue en busca de su tío.

Podía decirse que el lobo de Felix en todo el día no se calmó y ya lo estaba cansando, el no estaba acostumbrado a eso.

—Buenas noches vengo por Lee Sunoo.— Felix que seguía con la cabeza en la computadora ni siquiera le dirigió la mirada a la persona delante de él.

—Claro, ¿Usted es Lee Soobin?—

—No, soy Lee Minho.— Felix dejó de teclear, su lobo parecío haber reconocido ese nombre y fue en ese momento que pudo distinguir ese aroma a pino y madera.

Normalmente solo puedes oler un olor en cualquier persona, incluidos los betas, entonces Felix ya sabía lo que significa por eso se levantó lo más rápido que pudo y se fue en dirección a donde estaban todos lo niños.

Antes de que llegará alguien agarró su mano impidiéndole el poder seguir caminando y ahí fue cuando Felix se volteó y chocó miradas con la otra persona.