Broken | yoonmin

11

El viaje desde la casa de los señores Kim hasta el apartamento de Jimin fue silencioso.

Por un lado, Taehyung, que apenas había bebido, estaba muy concentrado en conducir, pero de vez en cuando comentaba algo.

En el asiento de copiloto estaba Yoongi, callado, observando por la ventana del auto mientras avanzaban por la avenida luminosa y tranquila.

Y por último, Jimin, sentado en el asiento de atrás, sin haber dicho ni una sola palabra desde que subió al auto. Ni bien comenzó el viaje él apoyo su cabeza contra la ventana y cerró sus ojos.

A mitad de camino, Taehyung lo observó por el espejo retrovisor.

—Está dormido —dijo, llamando la atención de Yoongi. Éste giró para mirar hacia los asientos traseros y, en efecto, Jimin estaba dormido—. ¿Lo despertamos? Llegaremos a su edificio en cinco minutos.

—Déjalo, ha sido un día largo para él —Yoongi vuelve a mirar por la ventana, su tono de voz y su lenguaje corporal dejan en evidencia que fue un día largo para él también.

En la armonía y calma del momento, Taehyung aprovechó para preguntarle algo a su amigo.

—¿Hace cuánto conoces a Jimin?

El pelirrojo le devuelve la mirada y luego responde.

—Un par de meses.

—Mhm —Taehyung asiente y mira hacia la carretera. Es la misma respuesta que Jimin le ha dado—. Juraría que se conocen de toda la vida.

Yoongi alzó sus cejas con sorpresa.

—Me refiero a que se ven muy cercanos el uno del otro, y se nota que se llevan bien, que tienen buena química.

—¿Química? —se preguntó en voz baja.

—Como tú y yo, aunque creo que Jimin te entiende un poco mejor. Y tú a él. Debe ser por eso que te mira de esa forma.

—¿Me mira de una forma en específico?

Taehyung frena lentamente en un semáforo en rojo y mira a su acompañante con una sonrisa ligera.

—Jimin ssi te admira.

—¿A mí? No soy alguien a quién se deba admirar.

—Claro que lo eres, no seas modesto ahora —dice con un tono de obviedad—. Pero me pone feliz que así sea, Jimin parece ser un buen chico.

—Yo solo hago lo que cualquiera haría.

—No, hyung, no cualquier persona ayudaría a alguien como él, y ambos lo sabemos —Taehyung se pone más serio, intenta que Yoongi se tome en serio sus palabras—. Solo algunos, como tú y como mi hermano, tienen el corazón tan puro como para hacerlo. Estás ayudando a este chico porque eres bueno y es por eso que él te admira.

—Intento hacer lo mejor que puedo...

—Créeme, lo haces bien. Jimin tiene suerte de haberte encontrado.

—No creo que él piense eso. He sido malo con él al principio sin que se lo merezca. Jimin no tiene la culpa de que yo sea un idiota.

—No eres un idiota, hyung.

—Estaba enfadado con Seokjin por haberle dicho a Jimin que yo lo ayudaría sin consultarmelo antes.

—¿Mi hermano hizo eso? —preguntó Taehyung sorprendido, ya que no sonaba como algo que su hermano haría.

—Sé porqué lo hizo, sé que intentaba ayudarme, pero en ese momento yo solo... Reaccioné mal.

—Tenías miedo —deduce Taehyung, dándole una mirada comprensiva. Yoongi asiente con la cabeza—. ¿Y ahora? ¿Aún tienes miedo?