Leyendas de un nuevo mundo

CAPÍTULO 4 DE LA 1ª LEYENDA

En frente de Kai había alguien, se encontraba en una habitación circular y extremadamente brillante y tenía delante suya una silueta de espaldas hacia él, la persona estaba iluminada por una gran luz que le golpeaba de frente, impidiendo a Kai distinguir el más mínimo rasgo.

La forma tenía pelo largo y apariencia de una mujer alta, su cabello tenía unas puntas extremadamente afiladas y se movía como si tuviera vida propia.

"¿Eres así de decepcionante?", dijo la mujer, su voz era divina y potente.

La figura se dio la vuelta lentamente, y justo antes de que su cara fuera revelada Kai fue cegado por la luz y todo se volvió negro.

De vuelta en el mundo real, Kai estaba desconcertado.

"¿Qué ha sido eso? ¿Una ilusión? ¿Una visión? ¿O me estoy volviendo loco? Se sentía...tan real"

Kai tardó en darse cuenta de lo que estaba pasando a su alrededor, tenía una de las espadas de Gáel pegada al cuello, pensaba que iba a morir pero al parecer la comandante se detuvo en el último momento.

"Te creo"

"¿Eh?", preguntó Kai, aún confuso por lo que vio hace unos segundos.

"Ese poder que liberaste antes, era el poder de un Entèro, es muestra de que dices la verdad"

Las espadas de Gáel se desmaterializaron y esta ofreció su mano a Kai para ayudarle a levantarse.

Kai aún estaba asimilando lo que vio antes y las palabras de Gáel solo le sorprendieron más, de todos modos, agarró la mano de Gáel y se incorporó.

"Gracias"

"Por cierto, ¿qué te pasó hace un momento? De repente te quedaste embobado y parecía que tenías la mente perdida"

"Oh, es que vi algo, tuve algo así como una ilusión que de repente apareció en mi mente, era extraño pero se sentía real"

"¿Y qué aparecía en esta 'ilusión'?"

"Había alguien en frente mío, pero no pude lograr ver de quien se trataba"

"¿Algún rasgo o característica que hayas podido diferenciar?"

"Era una mujer con pelo largo, y las puntas parecían cuchillos de lo afiladas que estaban, es lo único que he podido ver antes de volver al mundo real"

Gáel suspiró, "eres un tipo de lo más misterioso, ¿sabes? Todos los Entèros lo sois"

"¿A qué te refieres?"

"Bueno, tú apareces de la nada aquí, en Son Àgnaire, transportado mágicamente por una luz desconocida, y ahora además se te ha aparecido una mujer igual de misteriosa sin ningún motivo"

"Y los Entèros en general son extraños, son seres supuestamente creados por Entia para ser justicieros y tal, ¿pero qué tan real es eso? Solo sabemos de ellos lo que quieren que sepamos"

Kai se quedó pensando sobre lo que dijo Gáel, una idea le vino a la mente.

"La luz de la alucinación que tuve antes era bastante similar a luz que me trajo aquí, ¿crees que esa mujer que vi tendrá alguna relación?"

Gáel observaba a Kai mientras debatía sobre lo que dijo.

"Sin duda alguna", y sin decir más empezó a caminar hacia la ciudad de Son Àgnaire.

"Sígueme"

"¿Por qué? ¿Cuál es tu plan?"

"Por el momento somos aliados, voy a hablar con mis superiores del Imperio y ver si trazo algún plan, o si al menos obtengo una pista que seguir"

"Ya veo"

Gáel y Kai llegaron al castillo del Imperio de Son Àgnaire.

"¿Tú vives ahí Gáel?"

"Sí, aunque no tengo tantos lujos como la realeza o nobleza"

"Bueno, he de decir que este castillo es bastante grande, no había nada parecido en Torneido"

Gáel fue hacia las puertas y le dirigió la palabra una última vez a Kai.

"Date una vuelta por la ciudad mientras comento la situación, te quiero aquí en una hora, y no te preocupes, la gente ya no te ve como un enemigo público"

Kai se alejó del castillo, algo molesto por lo fría que actuaba Gáel, pero se acababan de conocer así que era algo normal.

Había televisiones gigantes presentando las noticias más recientes, Kai no les prestaba mucha atención, hasta que vio algo en una que le dejó perplejo.

Vio a Torneido, su antiguo planeta de residencia, totalmente cubierto en sombras y tempestades, no cabía duda de que esto era obra del ataque de Rin.

Kai murmuró algo entre dientes.

"Maldito Rin...me las pagarás"