Había olvidado lo oscuro que se siente este hueco de mi cabeza, tan insípido como solo yo podía ser, me daba calma mientras me abruma por más ironía que eso represente.
Hay varias personas que aparecen como más actores .
Llegan con una gran entrada, una imagen pura y grata, una agradable sensación al oído pero. . .
Que tan bueno es el héroe y que tan malo es el supuesto villano.
Dicen que soy mala por cuidar de mi y dicen que soy buena por dar tanto de mi hasta no poder más y olvidarme de quien fui.
Dicen tantas cosas que a veces olvidó que debería decir, sube el talón y todo el mundo espera cosas de mí.
Una máscara, una impecable actuación, un te amo que sea falso pero que suene lleno de emoción, una mentira que no sea lo que parece y un engaño que a todo el público conmueva.
Ella me asusta, me asusta la sutileza con la que sabe que decirle a todos, me asusta saber que deje mi papel por unos momentos y que con eso me condenare .
Le temo a volver a este hueco oscuro y lujubre que hice mi hogar, pero también me niego a ella, me niego a que me parta en pedazos, me niego a gastar mis pulmones, mis cuerdas vocales y mi alma en alguien que se que no lo haría por mi, me niego a interpretar el papel que ella me quiso dar pues no soy un héroe y aunque lo fuera prefiero mil veces mancillar ese título con mentiras que seguir su juego.
No soy tú amiga perfecta que da buenos consejos, no soy la buena samaritana que te levantará después de que te negaste a escuchar las advertencias, no soy nada de lo que crees que soy y se que eso acabará con tú cuento y se que acabarás conmigo si te dejo pero llevo años en este sucio show y aún con todo mi vestuario dañado y mi garganta a medio romper me he presentado.
Ambas teníamos un reflector y tú solo querías robar el mío por un esplendor que tú no tuviste.