Style

44. Cumpleaños Kai

Confío en que me ves
por quien realmente soy...

Kaia POV

Amaba el mes de Abril porque abril significaba mi cumpleaños y como amaba mi cumpleaños.

— ¿Dónde estás mon amour? — grita Charles desde el living para acercarse hasta su habitación. — Te encontré.

— No lo hiciste. — canturreó divertida cuando posa sus manos en mi cintura para acercarme a él. — ¿Qué tal te fue entrenando?

— Bien. — responde simplemente para besarme suavemente a medida que sus manos van bajando a mi trasero para apretarlo. — Pero es mejor estar a acá.

— Si claro. — murmuro divertida para alejarme de él y volver a retocar mi labial.— Espera.

— ¿Qué?

— ¿Fuiste al gimnasio y no llegaste sudado? — me giró para verlo provocando que sonría divertido cuando ve que colocó mis manos en mi cadera. — ¡Charles! Dime la verdad.

— La verdad.

— ¡Charles! — me quejo cuando toma mi brazo para acercarme a él y me termina tomando de las piernas provocando que las enrolle en su cintura. — Sin mentiras.

— Si te digo la verdad dejará de ser sorpresa. — murmura para besar cortamente mis labios provocando que arrugue mi nariz porque nuevamente tendré que retocar mi labial. — Pero te traje algo.

— ¿Por qué me escondes cosas ?— me quejo algo insegura para intentar bajarme pero sus manos están sujetas en mi trasero. — Ya no quiero esto.

— Kaia. — susurra besando mi mejilla con una sonrisa mientras me lleva a la cocina. — Prometo que no es nada malo.

— Pero... — no puedo decir nada más cuando me coloca encima de la encimera notando como hay una cena especial preparada. — Oh.

— ¡Empezamos a celebrar tu cumpleaños! — murmura emocionado Charles provocando que lo acerque a mí para besarlo. — ¿Eso significa que no estás enojada?

— Gracias amore. — susurro para bajarme de la encimera y sentarme en un asiento para empezar a comer. — ¡Esto está muy bueno!

Charles ríe divertido para sentarse a mi lado y empezar a comer conmigo, muevo mi cabeza feliz a medida que degustó mi pizza favorita.

Podría decir que amaba mi cumpleaños porque dentro de todo, era una de las únicas fechas donde las personas se acordaban de tú existencia y te llamaban, a pesar de ello, también lo odié durante mucho tiempo, porque muchas personas hicieron sentir insignificante un día que para mí era especial, hasta que dejó de serlo.

Desde que Charles había llegado mi vida, mi cumpleaños se transformó en el día más esperado del año porque con cada detalle que hacía lo volvía especial, pero más que nada, con solo tenerlo a mi lado, mi cumpleaños se volvía el mejor día del mundo.