Ayumi recibe una carta extraña en la noche, una supuesta invitacion para un instituto llamado Seiza. Seria lo normal para una estudiante pasar por algo así... salvo por que dicho instituto no parece existir. Su paradero es desconocido y no tiene ni...
El joven apareció en el vacío y silencioso instituto con Ayumi en brazos y suspiró cansado tras haberle dado un delicado beso en la cabeza. Caminó hasta el cuarto de ella y la acostó en la cama. Joven: perdóname. Te juro que es por tu bien.
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Arrimó una silla y agarrándola tiernamente de la mano, se inclinó en el colchón y se quedó dormido a su lado.
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2 horas pasaron y Ayumi al fin se despertó. Se estiró extrañada, miró a su alrededor y quedó totalmente confundida.
Ayumi: estaba en el festival… [verse vestida con su ropa normal] ¿cómo diablos acabé aquí?...
Una punzada de dolor le atravesó el cuello. Se lo tocó y notando la herida de los colmillos, se sobresaltó recordándolo todo.
Joven: [apoyado en el marco de la puerta, con los brazos cruzados] al fin despertaste. Me tenías preocupado.
Ayumi: ¿por qué me traes aquí?. ¡¿Dónde están todos?!
Joven: ey, calma, calma. No es bueno estresarse para el cuerpo.
Ayumi: [fulminarlo con la mirada] acércate.
Joven: ¡oh! Que invitación más tentadora. ¿quieres que te dé un beso?.
Ayumi: [seria] no. Quiero pegarte un puñetazo en la cara. Por favor.
Joven: jajaja, no te atreverás.
Ayumi: [sonreír dulcemente] ponme a prueba. Ven y acércate.
El joven se acercó sin rechistar, se agachó al lado de la cama y cerró los ojos.
Joven: Cuando quieras.
Ayumi no se lo pensó dos veces ni pestañeó. Levantó el puño y con todas sus fuerzas, le encestó tal puñetazo que lo sentó de culo en el suelo.
Joven: ¡wow!. [Limpiarse la sangre del labio con una sonrisa divertida] eso sí que dolió.
Ayumi: ¡pues acércate y pon la otra mejilla! Aún tengo ganas de darte otra tunda.
Joven: pues sí que cambiaste. Yo no te recordaba tan violenta.
Ayumi: [fruncir el ceño con el puño detenido en el aire] ¿recordaba?...
