Recaída| Traducción

Capítulo 11: Tormenta de Citoquinas

Una tormenta de citoquinas (hipercitocinemia) es una reacción inmunitaria agresiva del cuerpo a una infección viral y a los medicamentos, durante la cual se producen activamente moléculas peptídicas (citocinas), se desarrolla una inflamación sistémica extensa y se interrumpe el funcionamiento adecuado del sistema inmunitario.

Hermione Granger siempre ha sido una chica sensata. De niña, cuando recibía otra muñeca como regalo de la tía Maisel, no hacía muecas ni arrugaba la nariz, sino que la cambiaba con una vecina por pilas de libros infantiles, que regalaba con la esperanza de arrancarla de la televisión. A Hermione no le gustaba mucho la ficción, pero era mucho mejor que un pedazo de plástico sin sentido con estopa encima.

En su primer año, cuando el desagradable Ron Weasley y el mucho menos desagradable Harry Potter la salvaron de un troll de montaña, se dio cuenta de que no debería haber resoplado en respuesta a las lamentaciones de sus padres: "¡Cariño, no puedes sentarte sobre libros todo el día! ¡Al menos trata de hacer amigos!"..

Esto le enseñó a levantar menos la nariz.

En su tercer año, después de un intento inútil de estar a la altura del buen nombre de Sirius Black, se dio cuenta de que a veces las cosas suceden solo porque tienen que suceder. Aprendió que no se puede entrar en el mismo río dos veces. Y también que con la ayuda del ingenio y la magia puedes girar el lecho de este río en la dirección que necesites.

En su cuarto año, llegó a la conclusión de que no tenía ni idea de lo desagradable que era Ronald Weasley.

En su quinto año, aprendió que ni siquiera la amistad, el coraje y el cerebro son capaces de contener la oscuridad que se aproxima.

En el sexto, descubrió que Ron Weasley siguiera siendo igual de desagradable, pero siempre dejó que la mirara con esos ojos. Y también que la infancia ha terminado irreversiblemente y ahora están solos, obligados a depender solo el uno del otro; las personas indeseables número uno, dos y tres. No importaba cuán jóvenes e inexpertos fueran frente a un peligro real, sobrevivieron. << Sobrevivimos >>

Ha resuelto todos los acertijos. Casi todas las cabezas de la Hidra fueron cortadas. Pero no esperaban que la última arteria palpitante de esta criatura fuera una de ellas. Que el largo y peligroso camino terminará en sacrificio. La bestia aceptó la recompensa envenenada, pero el veneno no funcionó como Dumbledore esperaba ...

Mientras Hermione recordaba los acontecimientos, se reprochó a sí misma por haberlo evitado si lo hubiera descubierto antes, si hubiera tenido un poco más de tiempo. Pero se dio cuenta demasiado tarde. El día de la Batalla de Hogwarts ...

No había visto el cadáver de Harry, nadie lo había hecho, así que tenía pocas dudas de que estaba vivo, a pesar de los vítores de los mortifagos. Si Hermione hubiera llegado a conocer a Voldemort mientras tanto, estaba segura de que no habría perdido la oportunidad de mostrar el cadáver de un enemigo derrotado.

De todos modos, se apresuraron a la batalla, ¿qué más quedaba? Ginny se separó del abrazo de su madre y corrió hacia adelante como un rayo, luchando contra Voldemort, lanzando su característico maleficio de murciélago uno por uno. Por un momento se sintió confundido, luchando contra las criaturas que se aferraban a él, Nagini inmediatamente corrió en defensa de su maestro. Todo sucedió tan rápido; la garganta de Ginny se abrió, terminó ahogándose con su sangre, Neville cayó muerto sobre las baldosas de piedra, la espada de Gryffindor en una mano, la de Nagini cortada por la mitad , una sonrisa feliz en sus labios, el grito enojado de Voldemort... Luego un empujón de la derecha y la oscuridad.