|Narra Halley|
¿Thomas o Minho? ¿Minho o Thomas? Suspiré, no podría ser tan difícil. Gruñí de frustración y golpeé a una piedra. Me senté en el suelo y rodeé con mis brazos mis piernas, las cuales se encontraban pegadas a mi pecho. Oculté mi cabeza en el hueco que formaban las rodillas.
Cerré los ojos y comencé a pensar en los pros y los contras de cada uno.
Minho es un chico increíble, es imposible aburrirse con el, y lo conozco desde hace más tiempo. Es guapo y su sonrisa es preciosa, a pesar de su sarcasmo es un chico dulce y sus bromas sarcásticas lo hacen único. (Soy la fan #1 de Minho a si que más vale que pare xD)
En cuanto a Thomas, es muy agradable y simpático. La conexión instantánea que sentí con el, me hizo reflexionar acerca de lo que pudimos haber sido en el pasado. Es gracioso y lindo.
Estuve minutos reflexionando, pensando en cada uno de los momentos que había vivido con cada uno. Sin duda ya tenía a un ''ganador''. Minho. Me levanté y corrí hacia el Claro, en busca del chico. Pregunté a un par de chavales que lo único que me dijeron fue un: ¿A mi que me cuentas?
Idiotas.
Lo busqué por la Hacienda y por el bosque, en el Laberinto no podría estar debido a que las puertas ya habrían cerrado. Entonces decidí ir al único sitio en el cual Minho podría estar, la Sala de Mapas. Caminé en dirección al edificio. Cuando me iba a disponer a abrir la puerta oí unos gritos.
-¡La conozco desde hace más tiempo, gilipullo! -Pude reconocer la voz del asiático.
-¿Y qué? Tu no sabrías como cuidarla -Este era... ¿Thomas? -Tengo derecho a enamorarme.
-Halley es mía -Su tono sonó tan duro y frío que sentí un escalofrío recorrerme toda la columna vertebral.
Hubo un silencio que pareció durar horas. De repente, oigo gruñidos y golpes. Sin dudarlo abro la puerta de una patada. Thomas y Minho se estaban pegando, y lo peor de todo, por mí. Miré a ambos, con el ceño fruncido y cruzada de brazos, esto había llegado demasiado lejos.
-¿Se puede saber que foño hacéis? -Les grité, estaba furiosa, pero no con ellos, sino conmigo misma.
-Elige -Dijo Thomas con una mirada que realmente asustaba- Él o yo.
Sentí mis piernas temblar, eligiese a quien eligiese, me iba a odiar uno de los dos. Me limité a negar con la cabeza y mirar al suelo. Era muy cobarde, pero no quería conocer sus reacciones.
-Elige -Esta vez fue Minho.
-Uno de los dos me va a odiar -Contesté- No elijo a nadie. Esto ha llegado demasiado lejos y todo por mi culpa. Ahora hay que centrarse en salir de este fuco sitio. Espero que volváis a ser amigos.
Me di la vuelta y comencé a caminar hacia la Hacienda. Las lágrimas caían por mis mejillas y yo las intentaba secar con mi camiseta. Estaba cansada y necesitaba dormir, pensar acerca de todo. Me subí a mi habitación sin cenar y me escondí entre las sábanas, como si ese trozo de tela fuese a protegerme de mis problemas. Oí la puerta abrirse, pero ni me inmuté, no merecía la pena prestar atención. Noté un peso caer a mi lado y fue entonces cuando recordé que dormía en una habitación compartida.
-Se que no estas dormida -Entonces me destapó y pude ver a Minho, su rostro cambió en un instante; de enfado a preocupación- ¿Has estado llorando?
-Lárgate, Minho -Le espeté volviendo a taparme con las sábanas, pero de nuevo me destapó.
-Duermo aquí, gilipulla -Su tono era suave, como si no quisiese herirme- ¿De verdad no eliges a nadie?
-Minho, esto solo causará más problemas -Le dije a modo de respuesta- No voy a arriesgarme a perder a ninguno de los dos.
-Dime quien es y te juro que no se lo diré a nadie -Me extendió su meñique, rodé los ojos y lo acepté- Ahora dime.
-Eres tu -Las palabras salieron de mi boca antes de que pudiese pensarlas.
Una sonrisa se dibujó en su rostro, de verlo feliz yo ya podía morir contenta. Colocó sus manos en mis mejillas y juntó nuestra frentes, sin dejar de sonreír.
-Podemos mantenerlo en secreto -Me susurró y yo asentí con una sonrisa. Entonces juntó sus labios con los míos.
Parecía como si sus labios hubiesen sido creador para besar a los míos puesto que encajaban a la perfección. Dejé que su lengua entrara en una guerra con la mía. Ahora el era mi droga, ahora era mi chico.
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¡Nuevo capítulo!
Espero que las haya gustado, comenten que las ha parecido <3 #TeamMinho ha ganado, ¡sí! Bueno, este verano me pondré mucho las pilas con la novela, espero que las guste la idea. Comenten alguna que otra idea.
Pronto nuevo maratón, ¡yey!
Un besazo a todas, sois las mejores.
Miredeca.
PD: ¿Cómo queréis que llame a mis lectoras? ^^
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La chica del laberinto (Thomas, Minho y tu)
FanficElla no fue enviada por la caja, sino por el Laberinto. Todo lo que recuerda es que debe ser un chico. Pero, dos chicos entraron en su vida. ¿Logrará cumplir su objetivo?