El paso del tiempo

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Un año después:

Había pasado más o menos un año desde que entramos en ese edificio misterioso.

Un año en el que nos habíamos juntado casi cada semana para definir el show que habíamos encontrado.

Un año en el que los chicos y yo nos habíamos vuelto un gran equipo, aunque lamentablemente a Danny no se le había olvidado como ser un imbécil.

Merritt se volvió mi amigo desde las primeras reuniones que tuvimos con el equipo, es una gran persona a pesar de tener un pasado tan caótico.

En una ocasión, se le olvido que la reunión se había cancelado y llego a mi casa, porque sí, mi apartamento era el punto de encuentro.

Quiero aclarar que en ningún momento decidí esto.
Recuerdo que empezamos a debatir sobre donde serían nuestras reuniones y todos estuvimos de acuerdo en que no podía ser un lugar concurrido como una cafetería, un restaurant o algún lugar como esos.
Luego empezamos a hablar sobre que nuestras casas podían ser el punto de reunión, pero Danny dijo que su casa era un desastre; Merritt utilizo la misma excusa; Jack simplemente dijo que no se podía y Henley dijo que tenía mascotas, yo estaba por poner una excusa cuando Danny dijo:
"Las reuniones serán en casa de Collins" y todos estuvieron de acuerdo.
Dije que estaba bien, pero que a cambio casa uno debía traer un aperitivo, es decir, estaba dispuesta a poner el lugar, pero esto no era restaurante: iba a poner la casa, pero poner la botana ya sería muy avaricioso de su parte.

Volviendo a Merritt, ese día llego a mi casa con panecillos. No iba a correrlo de mi casa, por supuesto.

El menciono que había cancelado todos sus planes con tal de venir, así que le deje pasar y platicamos sobre cualquier cosa banal: el clima, los fantasmas, las cosas que nos gustaban hacer desde pequeños y al final Merritt pregunto sobre mis padres.

Le conté todo, sobre como mi padre era un gran mago hasta que falleció, sobre cómo fue vivir sola con mamá durante toda mi adolescencia; el cómo me afecto no tener una figura paterna.

Y por último le conté sobre la muerte de mamá: el único soporte que me quedaba.
Y saque todo aquello que me había afectado durante tantos años.
Y por primera vez en muchísimo tiempo me permití llorar delante de alguien, por primera vez me permití llorar en el hombro de alguien que no fuera la señora de la cafetería: por primera vez deje que alguien me diera consuelo.

A partir de eso nos volvimos inseparables y eso me parecía increíble, aunque a la vez era algo extraño el cómo nos llevábamos bien.

Cuando nos juntábamos para platicar parecíamos dos señoras chismosas, era una imagen un tanto cómica: éramos un adulto y una adulta pequeña quejándonos sobre la vida y juzgando a la gente.

Aunque lo mejor era cuando uníamos fuerzas para molestar a Danny, eso era lo mejor de cada reunión sin lugar a duda.

Hablando de Danny, no hay mucho que decir sobre él; sigue siendo un idiota.

Me molestaba bastante el hecho de que pensara que él era el "capitán" del equipo cuando era más que obvio que todos estábamos en el mismo barco y con la soga en el cuello puesto que teníamos que hacer que el show saliera a la perfección.

Eso y que a veces se comportara como un imbécil con Henley por lo de sus shows pasados.

Por cierto, Henley y yo nos volvimos amigas desde que puso un pie en mi casa:

Es una persona encantadora, después de la primera reunión se quedó más tiempo en mi casa y comenzó a halagarme sobre la decoración de mi casa, mi buen estilo y esas cosas.

Now You See Me / Jack WilderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora