Feliz Año Nuevo • BSD • Terminado

Destino. (Última parte)

La corrupción de un Ángel.

      - ¡¡¡Mori-san!!! ¡¡¡Ayúdenos por favor!!! -
Grita Atsushi entrando a la oficina del jefe de la Port-Mafia cargando a Dazai inconsciente en sus brazos, con múltiples heridas en su cuerpo y una herida en su cabeza.

      - ¡¿Qué fue lo que pasó?! - pregunta Mori sorprendido por aquel sorpresivo episodio.

      - ¡Es Chuuya! Él... Él...- se trabó gruñendo entre dientes ante lo que estaba a punto de decir.

      - ¡¡¡Habla Atsushi!!! ¡¿Qué fue lo que pasó con Chuuya?!

Akutagawa entra detrás, cargando a Chuuya atado fuertemente con su habilidad. El pelirrojo estaba temblando de dolor con el cuerpo en peores condiciones que la de Dazai, pero con una risa desgarradora que no cesaba.

      - Perdió el control de su cuerpo... Arahabaki está acabando con él, y Dazai no reacciona. Y si no para ésto Chuuya morirá junto con él. - dice Akutagawa mientras sostenía fuerte a Chuuya que forcejeaba mientras reía como loco.

      - Intentamos contactar con Yosano-sensei, pero está demasiado lejos ¡Pero usted es doctor, puede hacer algo!

      -¡Se lo ruego Mori-san! ¡Ayude a Dazai-san y a Chuuya-san! Ellos-

Los jóvenes hablaban uno arriba del otro, poniendo aún más nervioso al jefe de la mafia.

      - ¡¡¡Cálmense los dos!!! -
Ambos chicos pararon de hablar la mismo tiempo al oír la orden de Mori.
      - Acuestalo sobre mi escritorio. - le ordena a Atsushi mientras saca su maletín de doctor que siempre tenía cerca.
      - ¿Cómo pasó ésto? - pregunta al mismo tiempo que intenta buscarle el pulso a Dazai, pero cuando lo encuentra nota que estaba tan débil que parecía detenerse de a poco. Quizás no le quedaba mucho tiempo.

      - Dazai peleaba contra Fyodor en la prisión y Chuuya parecía estar del lado del ruso. Así que cuando le dió la orden, comenzó a atacar a Dazai con todo lo que tenía a su alcance. Chuuya al parecer, sabía que no podía tocar a Dazai así que empezó a atacarlo desde lejos y...

Mori escuchaba atentamente mientras revisaba el cuerpo de Dazai y lo primero que notó fue la herida en su frente.

      - ...Oyó una orden de Fyódor y le disparó en la cabeza.

      - ¿Y por qué habría de usar corrupción para eso? - dice mientras que con una pinza remueve la bala, observando que la misma no había llegado a atravesar el cráneo del todo. Seguramente obra de Chuuya. Algún raro sexto sentido hizo que detuviera el impacto de la bala antes de llegar al cerebro.

      - No, Chuuya no estaba usando corrupción en ese momento. Estaba bajo el control de Fyódor por el vampirismo que amenazó a la ciudad. Y cuando ese fenómeno se deshizo, Chuuya despertó y Dazai ya no reaccionaba, entonces enloqueció y atacó él sólo a Fyódor liberando a Arahabaki.
De alguna forma supo que tenía que acabar con él para terminar con todo el problema de la ciudad. - contó Atsushi.

Chuuya seguía delirando entre el dolor y las risas de Arahabaki que acababan poco a poco con él.

      - El pulso se detuvo. - señala Mori al palpar la vena del cuello de Dazai.
      - ¡Hay que reanimarlo ya! ¡Atsushi, trae el desfibrilador de esa esquina, pronto!- Dice mientras le desgarra la remera blanca para descubrir su pecho e intenta remover sus vendas con dificultad.

Al notar eso, Akutagawa las corta estirando una parte de su habilidad.

      - Gracias. Ojalá dejara de usar estas malditas cosas. - dice Mori agradeciendo por ahorrarle el estrés de los vendajes.