Daño Colateral

Cap 18

Denki se volvió el centro del universo luego de que fuera anunciado que el primer lugar recibiría una venda que vale un millón de puntos. Es decir, robas esa y ganarás el primer lugar en esta batalla de caballería, porque por más vendas que tengan los otros participantes ni de cerca llegarías al millón de puntos.

Esto puede ser un arma de doble filo, es decir, tienes la victoria en tus manos cuando empiece el juego, pero como todos obviamente buscarán al millón de puntos, serás el objetivo más cotizado y atacado. Es dudoso escoger ¿Arriesgarte y ser parte del equipo de Denki a pesar de ser atacados por todos y las altas posibilidades de perder la venda por eso? ¿O ser su enemigo y aprovechar para tomar la venta de un millón cuando Kaminari se agote por sus incontables enemigos?

Las dos opciones son muy buenas así que dependiendo como te desenvuelvas puedes tener grandes chances de ganar estando a contra o a favor de Denki. Pero todos pensaban en ser más cautelosos y prefirieron hacer un equipo que se adecuara a sus necesidades antes de unirse a él para tener la venda de un millón.

El rubio eléctrico pensó esto detalladamente y sabe que se encuentra en una gran desventaja aunque tenga más puntos y por mucho que sus otros compañeros. Nadie va a querer unirse a él, y quién quiera posiblemente no sería alguien compatible para hacer un buen equipo.

Por otro lado Midoriya estaba recostado en una pared, relajado como siempre, aunque el tiempo de hacer su equipo es menos de quince minutos... Él estaba cerca de su novia, la rubia americana y ésta parecía un poco ansiosa.

—¿Hay algo que quieras decir? —Preguntó.

—No, no es nada— dice con nerviosismo y vergüenza.

—Solo dilo Melissa. ¿Qué tienes en mente, cariño? —

Ella suspiró y empezó a jugar con sus dedos —¿Te molestarías si no hago equipo contigo? —

—Si no quieres me da igual— fue su respuesta.

—No, no eso— se adelantó para evitar una mala interpretación de sus palabras —no es que no quiera, pero pienso que realmente deseo que mires mis cualidades y no podría mostrarlas si siempre me apoyas en todo lo que haga. Así que, bueno... Ya sabes, quería saber qué piensas sobre eso—

Eso le dio un leve beso —suerte, pero dudo que me ganes— dijo lo último en broma.

—Tontooooo— le sacó la lengua —ya lo verás, si puedo hacerlo—. Ya más confiada, la rubia fue a hacer su equipo. Tenía algo en mente, pero era un tema algo difícil —Katsuki—

El chico explosivo se estremeció cuando escuchó la voz de ella detrás de él; estaba concentrado en formar su equipo y no notaba los pasos en su espalda —Melissa—

La rubia suspiró —Sé que últimamente no hemos estados en tan buenos términos, aún siento que me mientes y presiento que tú e Izuku se conocen desde antes— dijo su pensar —pero quizás yo esté equivocada y me dices la verdad y solo son cosas mías por los acontecimientos que han ocurrido— no dejo eso sin mencionar —quiero creer lo segundo— confesó —después de todo te conozco y sé lo emocional que puedes llegar a ser, así que no sería nada fuera de ti, decir que Izuku no me conviene solo porque descubriste que él me gustaba y que yo te gusto a tí—

La rubia se rascaba la nuca. Esto es más difícil de lo que pensaba —oye Katsuki, sé que son cosas que pasan y que uno no puede controlar. Después de todo, lo último en mi lista de deberes era una relación, y sólo pensaba en ser la heroína número uno. Así que te entiendo y sé que como yo y cualquier ser humano no tenemos control sobre ese sentimiento llamado amor—

—Intento hacer las cosas bien ¿Sabes? —continúa la rubia —es difícil tratar de ser madura cuando eres una adolescente de quince años, supongo— ríe irónicamente —valoro nuestra amistad, fuiste mi primer amigo en Japón e incluso entrenamos juntos por un largo tiempo... Así que estar peleada contigo me da un mal sabor de boca—