Volumen n°1
Male Reader x Male characters
"Cada uno se destruye a su manera"
╰┈➤ ... ¡!
(Ninguno de los one-shots son propiedad mia, sino de los autores de la comunidad angloparlante de tumblr y voy a poner creditos en el principio de cada one-shot...
Character(s) : Top Tighnari x FTM Bottom Male Reader
Autor/a : 4allthefours4
TW : Bondage, Juguetes, Sobreestimulación, Dacrifilia, Malo Dom Tighnari
Plataforma : Tumblr
Fandom : Genshin Impact
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Estar en una relación con Tighnari te permitió descubrir algunas cosas sobre ti mismo. Una, que la ropa femenina te hacía sentir más libre. Dos, que te encantaban las caricias en la cabeza. Y tres, que eres una perra cachonda.
"Nari, por favor...", tartamudeas, con el cuerpo sacudiéndose con cada pulsación del juguete que llevas dentro. El zorro se limita a mirarte, jugueteando con un pequeño dispositivo en la mano antes de volver a la lectura. Se suponía que esto era un castigo, pero el hombre no podía decir que no a tu cara llorosa, al menos a veces.
Te retuerces en tu sitio en la cama que comparten, con las manos aún atadas a la espalda. Tus pies y piernas están separados con una barra, lo que le da al zorro la vista perfecta de tu mitad inferior cada vez que desea mirarte. Te tomas los pocos momentos que sabes que tienes para recuperar el aliento, cambiándote de sitio a una zona mejor cubierta de menos fluidos tuyos que la anterior.
El castigo había durado al menos una hora, el zorro abandonó la cama después de sólo unos minutos de verte retorcerte. El razonamiento para el castigo era tonto, en realidad. Te habías distraído especialmente intentando vencer a Cyno en una partida de TCG, olvidándote por completo de devolver el libro que habías tomado prestado de la biblioteca una semana antes.
Tu récord perfecto de libros no atrasados se había roto, por culpa de un simple juego de cartas.
Sinceramente, si fuera cualquier otra persona a Tighnari no le importaría. Simplemente te recordaría el libro en tu mochila cuando volvieras a casa y te vería salir de la casa una vez más para devolver dicho libro. Por desgracia, o... por suerte, eras un cabrón cachondo que le decía que te castigara cuando lo considerara necesario.
La electricidad se dispara por tu espina dorsal mientras el juguete continúa con sus vibraciones anteriores, la intensidad mucho mayor que antes. Un vibrador de conejo era el juguete elegido para la actividad de hoy, capaz de estimular tanto tu interior como tu pequeña polla. "Quiero que me pidas disculpas por malgastar la luz del día jugando a las cartas cuando se supone que deberías estar devolviendo este libro". Tighnari finalmente habla, cerrando el libro en sus manos con un sonoro chasquido.
"¡lo SIEnto!" Arrancas, las vibraciones en tu interior se intensifican haciéndote arquear la espalda. Un gemido pecaminoso sale de tus labios hinchados mientras te corres por lo que parecía la décima vez esa noche. Sinceramente, habías perdido la cuenta de tus orgasmos después del tercero.
El zorro fennec suelta una risita mientras te observa retorciéndote en la cama. Observa cómo tus paredes intentan desesperadamente empujar el juguete hacia fuera, una pequeña cuerda que afortunadamente lo mantiene en su sitio. Había pensado en todo para que este castigo fuera lo más placentero posible.
Antes de que otro fuerte gemido pueda desgarrarte, unos suaves labios chocan contra tus hinchados labios, tragándose el gemido de tu garganta. La lengua de Tighnari te obliga a abrir la boca, no es que te estuvieras quejando, luchando con la tuya por el dominio. Casi tan rápido como empieza la lucha, termina, y tú dejas felizmente que la lengua del hombre explore tu boca.
Ningún rincón queda sin tocar mientras sus lenguas bailan juntas en un apasionado beso. Te quedas inmóvil cuando oyes un gemido especialmente fuerte y casi le arrancas la lengua al otro de un mordisco. El juguete está al máximo y las fuertes vibraciones hacen que te corras de nuevo, abriendo la boca en un grito silencioso.
Tighnari observa con los ojos muy abiertos cómo el líquido sale a chorros de tu coño, riéndose entre dientes mientras tus piernas se crispan mucho más que antes. Las lágrimas brotan de tus ojos mientras suplicas al zorro que detenga las vibraciones que te arrancan orgasmos a diestro y siniestro.
Tu sensibilidad te había alcanzado por fin, haciendo casi insoportables las antes placenteras vibraciones. "Una más, amor. Sé que puedes darme uno más así". susurra Tighnari, haciendo girar el vibrador dentro de ti. Separa la otra parte de tu polla, eligiendo en su lugar frotar el nódulo por sí mismo.
Sus manos son hábiles mientras observa el pulso de tu coño con cada movimiento de su mano. Su mano izquierda agarra el mango del juguete, metiéndolo y sacándolo dentro de ti mientras la derecha acelera su asalto a tu polla. Tu espalda se arquea involuntariamente y un gemido pornográfico sale de tu garganta.
Tus ojos giran hacia la nuca y te corres una vez más, con la vista en blanco durante unos segundos. "Ya está. ¿Está satisfecho mi guapo bebé?" te susurra Tighnari al oído. Asientes con la cabeza todo lo que puedes, el sueño amenaza con llevarte. "Duerme, mi príncipe. Yo me encargaré de este lío por ti".
Dejas escapar un pequeño zumbido, la visión se vuelve negra mientras te desmayas de cansancio. Lo último que oyes es una leve risita del hombre que está a tu lado.
