Volumen n°1
Male Reader x Male characters
"Cada uno se destruye a su manera"
╰┈➤ ... ¡!
(Ninguno de los one-shots son propiedad mia, sino de los autores de la comunidad angloparlante de tumblr y voy a poner creditos en el principio de cada one-shot...
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"Sei... ¡¿qué?!", exhalaste, el aire se te salió de los pulmones cuando básicamente te tiró sobre la cama, manoseándote como si no fueras a hacer nada. Estaba molesto, podías verlo en sus ojos y en la forma en que te miraba.
Pero, ¿por qué era así? ¿Por qué se comportaba como un animal salvaje que enjaula a su presa y se dispone a devorarla? Pero tus pensamientos pronto volvieron a concentrarse en la sensación del frío metal contra tus muñecas y el familiar chasquido de las esposas.
Te encontraste esposado al marco de la cama, sin poder mover las manos, tu novio enjaulando tu cuerpo bajo el suyo, sin darte ninguna posibilidad de escapar. "¿Se siente bien?", te preguntó, mirándote fijamente como siempre lo hacía, su actitud había cambiado de repente.
"¡¿De qué estás hablando?!", le preguntaste, confuso, sin entender qué demonios estaba pasando ahora mismo. Normalmente te habría sido fácil leerle, pero ahora mismo te parecía imposible. Al ver que te quedabas boquiabierto con su pregunta, algo en él se quebró.
¿Cómo podías no saber a qué se refería cuando era evidente que habías estado coqueteando con uno de tus compañeros de clase? ¿Por qué te hacías el tonto cuando era tan obvio lo que habías hecho?
Y, lo más importante, ¿por qué lo hiciste? ¿Para ponerlo a prueba? ¿Para molestarlo? ¿Para darle celos? Muchas más preguntas pasaron por su cabeza mientras su boca se aferraba a tu cuello, primero con su lengua rozando ligeramente tu piel.
Un escalofrío recorriéndote la espina dorsal al sentir su húmedo músculo burlándose de ti, luego un aullido saliendo de tu boca cuando sus dientes se hundieron en la extensión de tu cuello, succionando la carne y mordiéndola, dejándola rodar entre su lengua y sus dientes.
Una vez hubo terminado, admiró su obra maestra, el chupetón que te había hecho ya era de un rojo brillante mezclado con tonos azules y morados, perfectamente visible para la próxima vez que alguien viera ese lugar. Pero no era suficiente.
Necesitaba marcarte más. Mucho más. Necesitaba mostrar al mundo entero a quién pertenecías. Tenía que demostrar a todos los seres humanos que eras suya y sólo suya. Nadie más podía tenerte. Sólo él podía y sólo él podrá.
