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Yeri tenia dos dias en casa de edward a decir verdad no se veian mucho, edward llegaba y ella estaba en su habitación.

Comian algo, se saludaban y ya esta, no se volvian a ver hasta el otro dia por la tarde

Eso no le parecia realmente malo pero si solitario, hablaba con merari y está le decía que hablara con el, y le dijera lo que pasaba, pero ella sentia que no tenia ningun derecho de reclamar ni pedir nada.

No eran pareja, por lo cual edward podria hacer lo que se le antojara.

Aunque estaba confundida ¿por qué edward había llamado suegra a su madre? no entendía el porque de eso..

Y ahi estaba alistandose para la universidad, un sábado por la mañana cuando salió en la cocina estaba un edward en pijama.

— hola..— Saludo ella acercándose a tomar un vaso de agua, edward le miro.

— ¿Sales?— Preguntó, yeri asintio y le miro, este tomaba cafe y estaba despeinado, tenia un pantalón de pijama negro y una camisa gris con un estampado rojo de algo.

— voy a la universidad..—

Edward frunció el seño.

— ¿En sábado?..— Preguntó yeri asintio.

— Si, tengo una materia extra y el profesor decidió que fuera en sábado..— Dijo esta levantando los hombros.
Edward asintio y dio un trago de su cafe.

— Te llevo..—dijo edward.

— No te preocupes yo...—

—no fue una pregunta...— Dijo este interrumpiendo, yeri bufo y asintio.

Algunas actitudes le confundían, pero yeri no era la unica..

Dentro del auto edward la llevo a donde era la universidad de yeri tomando por sopresa el hecho de que también era su universidad solo que el entraba por otro lado y estudiaba en otra area de edificios.

—porque no me dijiste que ibas a esta universidad — Pregunto mientrasse aparcaba en el estacionamiento, yeri le miro.

— No lo vi necesario, porque?— Solto ella

— Es mi universidad también, solo que estoy en otro edificio..—Dijo el, yeri se sorprendió.

Lo miro un segundo y luego desvío la mirada cuando el la miro directamente.

No sabia si debía, pero realmente necesitaban conocerse, no sabían nada más haya de sus nombres y edad.

Bueno, a decir verdad no sabían sus edades tampoco.

— Edward...— susurro yeri, edward no dijo nada solo espero a que hablará. — Luego de que llegue, podemos hablar?..— Dijo yeri, el pelinegro frunció el ceño confundido.

— Claro, pero de que?— Preguntó curioso, yeri suspiro..

—¿De nosotros?— Dijo algo dudosa, edward se mordió la mejia interna y asintio mirando hacia al frente —apenas nos conocemos ..—dijo yeri.

Edward sabia bien a lo que se referia, asi que la idea no le desagradaba del todo.
Quería conocer a yeri.
Debía hacerlo si iba a ser la madre de su hijo..

—dime a que hora sales, pasare por ti..— Dijo este, yeri asintio, no iba a renegar, andar en camión era pesado..

— Salgo a las 2 pm..— dijo, edward asintio, tomo su billetera, y de esta saco una tarjeta de credito y se la paso a yeri, esta le miro confundida..

— Toma, usala..— Dijo este, yeri nego rápidamente.

No usaria su dinero.

— Vamos, usala..— Le volvió a pedir...

Inesperado -Crymua-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora