Tattoos and Motorcycles | Paulina Villarreal

CHAPTER V

Cuando llegamos al pequeño observatorio aguardo silencio y miro al gran grupo de personas esperando allí.

Me recuesto sobre mi moto y empiezo a plantearme si quedarnos o ir a otro lugar.

-No es la gran cosa después de todo -digo mientras me giro para mirar a Paulina y levantar el cristal de su casco para que me preste atención- es solo mirar las estrellas y un montón de cosas antiguas y aburridas, mi casa es mejor que esta porquería.

-Iremos a tu casa entonces? -pregunta expectante, pero niego con la cabeza.

-Podemos quedarnos si es lo que quieres o podemos ir a un mirador a mirar las estrellas sin más -propongo y esta vez es ella quien se encoje de hombros.

-Que sugieres?

-Podríamos ir a susurrarnos cosas cerca de un acantilado y tal vez darnos besitos -ronroneo mientras acerco mi rostro al suyo para ver sus labios, pintados ligeramente de rojo.

-Dime razones para no golpearte -pide entre cerrando los ojos, y yo decido ir un poco más allá.

Mis labios se sentían fríos, debía calentarlos de alguna manera, no?

Me giré para levantar un poco mi casco y luego le dí un pequeño beso, un piquito.

Estaba bromeando, pero podria asegurar que ambas terminamos sonrojadas ante aquello.

-Eso no estaba en la lista de razones para no golpearte, May -Pau mantiene una expresión seria y no se si es real y no le gustó o esta fingiendo.

-Bueno, deberías añadirlo -Respondo mientras me giro hacia adelante y  vuelvo a colocar mi casco- puedes golpearme o besarme, aceptaré cualquiera de las dos -digo mientras enciendo la moto y agarro sus manos para que me abrace y ponernos en marcha hasta el mirador.

Paulina no responde a mis últimas palabras, pero eso no evita que se abrace a mi como lo había estado haciendo durante toda la cita.

Cuando llegamos al mirador habían unas cuantas parejas más, pero todas estaban en sus asuntos, con el suficiente espacio de distancia entre los autos.

Yo estacioné la moto y me encaminé junto a la pelirroja hasta una banca frente a la orilla para ver la vista.

Ella se sentó a mi lado y yo la observé con fascinación hasta que poso sus ojos en mi.

-Me gusta como se ven las luces de la ciudad desde aquí, y como se ven las estrellas.

-Es lindo -recuesto mi cabeza en mi mano y me siento de manera que le doy el frente a ella- aunque la vista es impresionante, las luces de la ciudad palidecen frente a la luz en tus ojos -digo reprimiendo una sonrisa.

-Eso fue un intento de piropo? -pregunta luego de rodar los ojos con diversión.

-Lo que tú quieras que sea -respondo encogiéndome de hombros.

-Que te gusta hacer en tus tiempos libres? Responde algo que ya no sepa.

-Mmm.. además de dibujar, andar en moto, pasear a mis perros, hacer ejercicio y meterme en problemas? -enumero mis pasatiempos, los cuales estaban segura de que ella conocía- esta difícil... me gustan los video juegos -respondo con una sonrisa de emoción como si aquello fuera una novedad.

-A ver otra cosa -dice mientras niega con la cabeza.

-Amm... leer? Tengo algunos libros en casa.

-Bien, no luces como una chica que lee, cual es tu género favorito? -pregunta mientras también se sienta para quedar frente a mi.

-Deberían hacer que los libros lesbicos sean un género -bromeo- sin duda ese sería mi género favorito, aunque también me gusta el terror, y las distopias... espera -digo elevando un poco la voz- los libros de zombies, oh cielos, sin duda esos son mis favoritos -cuento con mucha emoción ganandome una pequeña risa cariñosa por parte de mi linda chica.