"Microrelatos"

30- Por ti y por mí.

—Propongo un brindis —dice el señor Kanawut poniéndose de pie ante la celebración de navidad—. Un brindis por mi hermosa familia y por qué mi hijo Gulf por fin nos presenta a su novio Mew y a su madre.

—Papá… —dice Gulf sonrojado.

—Hijo, 1 año estuvimos esperando este momento —responde la madre.

—Mamá, son mis padres, son personas importantes en mi vida, no puedo llegar y presentar a alguien si no hay algo estable primero —responde Gulf.

—Apoyo eso —dice la madre de Mew—. Mi hijo estaba igual, moría por saber quién era su novio.

—Mamá, como dijo Gulf presentar a tus padres, es algo importante, no es un juego, primero teníamos que estar seguros ambos —dice Mew tomando la mano de Gulf—. Pero aquí estamos hoy, celebrando una navidad en familia, porque ambos ya estamos seguros de que nos amamos.

—Así es —apoya Gulf—. Esta navidad me hace feliz el poder estar con las personas que más amo en este mundo, mis padres, mi novio y mi suegra que desde que la conocí ayer me ha acogido con mucho cariño.

—Porque eres otro hijo para mí —responde la madre de Mew—. Estoy feliz de que mi hijo haya encontrado a alguien tan maravilloso como tú.

—Gracias mamá —responde Gulf.

—Entonces, ¿salud? —pregunta el padre de Gulf alzando su copa.

—¡Salud! —gritan todos a la vez.

—Yo quiero hacer otro brindis —dice Mew muy feliz—. Un brindis por ti y por mí, que sean muchos años más juntos.

—Estoy seguro de que jamás te libraras de mí —responde Gulf muy feliz.

—Es lo que menos deseo hacer en la vida —responde Mew—. No me quiero librar nunca de ti.

—Espero que su amor sea eterno —dice la señora Kanawut.

—Espero que su amor sea siempre bendecido —dice la madre de Mew.

—Chicos, tienen 21 años, están partiendo en la vida, no niego, me sorprendió tanto cuando mi único hijo me dijo al borde de las lágrimas que era homosexual, increíblemente en mi mente pasaron millones de imágenes, desde que nació hasta cuando se armó de valor para decírmelo —cuenta el padre sentándose—. Mi pequeño bebé, ya no era un bebé, era un adulto, un adulto que pese a ser independiente estaba frente a mí llorando, buscando las palabras para decirme su verdad.

Gulf mira a su padre y empezó a sollozar.

—Limpie sus lágrimas y lo abracé fuertemente, en más de una oportunidad lo escuché hablar por celular con Mew, solo esperaba el momento que él viniera a mí, me lo dijera y lo hizo, lo abracé y lo ame más. Gulf jamás me dio un problema mientras iba creciendo, ¿cómo podría rechazar a mi único hijo? ¿Cómo podría enojarme con mi bebé? Jamás. Cuando lo vi llorar y decirme; Papá, lo siento mucho por defraudarte, soy homosexual. Yo lo abracé tan fuerte que quería que sintiera todo mi apoyo y que no estaba solo, que si la sociedad lo discrimina tiene un padre que lo iba a amar por siempre y que no necesita de nadie de afuera para ser feliz bajo su condición.

—¡Papá! —grita Gulf para ponerse de pies y abrazar a su padre—. Te amo.

—Yo también te amo hijo, te amo tanto y mis palabras no son vacías o falsedades, que no te importe jamás la sociedad o lo que digan, mientras seas feliz y Mew te haga feliz, solo ámense y cuídense, que sus padres aquí presentes jamás los dejarán de amar y apoyar —dice el padre sollozando—. Te amo hijo y Mew por favor, sean felices sin importar lo que los otros digan.

—Lo prometo papá, gracias por tanto amor y apoyo —responde Mew con una amplia sonrisa—. Conocer a Gulf ha sido una enorme bendición y él sabe perfectamente que lo que otros digan no nos afectará jamás, ¿verdad amor?

—Es verdad —responde Gulf volviendo a su lugar.

—Entonces espero que podamos pasar muchas navidades como está, en familia —dice el padre.

—Otro brindis por la felicidad de nuestros hijos y que vengan muchas cenas navideñas cómo está —dice la madre de Mew—. ¿Salud?

—Salud —responden todos.

Mew con Gulf unieron sus manos y sonríen ante la aceptación de su familia.

—Te amo —dice Mew.

—Yo más —responde Gulf.

꧁𝐹𝑖𝑛꧂