𝐼 𝑊𝐴𝑁𝑁𝐴 𝐵𝐸 𝑌𝑂𝑈𝑅𝑆 - 𝐶ℎ𝑟𝑖𝑠𝑡𝑜𝑝ℎ𝑒𝑟 𝑀𝑜𝑟𝑔𝑎𝑛

✵ Prologue ✵

Christopher

Abro mis ojos y siento como me pesa la cabeza, no tardo en darme cuenta que tengo a una morena y una castaña durmiendo conmigo. Ayer me pillé tal borrachera que apenas me acuerdo de lo que paso pero no me hace mucha falta saber que me folle al par.

Me levantó y me voy a la ducha con la esperanza de que asi al menos se alivie esta maldita resaca ya que tengo que ir al comando.

Puedo permanecer al menos veinte minutos bajo el agua... del botiquín que hay en el baño cojo una pastilla y la digiero para que se me pase el dolor. Me visto y comienzo a despertar a las dos mujeres que aún duermen.

—oye... la norma uno es que cuando se acaba de follar se larga uno a su casa.

La castaña es la primera que se levanta, se incorpora y bosteza mientras que sus pechos siguen al aire dejándome claro que anoche los devoré como quise por las marcas que yacen en ellos.

Salgo de la habitación y Miranda está en la cocina, me ha preparado café, un vaso de zumo de naranja y un par de rebanadas de pan. No pienso comer nada por que estoy seguro que si lo hago vomitare. Me limitó a beber el zumo y salgo por la puerta con Zeus hacia el comando.

Miro el reloj que tengo sobre la muñeca y me maldigo internamente por que llego tarde a una reunión, mi cabeza sigue doliendo y mi resaca es notoria.

Me pongo las gafas de sol intentando disimular lo evidente y Zeus y yo caminamos por los pasillos. La inútil de mi secretaria la ha vuelto a cagar por que tiene más de dos carpetas tiradas en el suelo y los papeles sueltos por todo el espacio, es Patrick quien la ayuda pero al verme deja de hacerlo.

—llegas tarde. —es como si quisiera darme un regaño a mi.

Me rio. No me importa, de todas maneras tendré que escuchar a Alex.

Entregó el perro a la secretaría y camino con el mismo capitán hacia la sala de reuniones, pensaba que sería con la elite pero veo que no... faltan personas. Solo está el general Gauna, uno de los miembros del consejo y Alex.

Me siento dejando a mi capitán detrás de la puerta. Alex suspira y me mira con rabia ya que ni si quiera me he quitado las gafas.

—joven Christopher, me alegro de verte.

Andreas De novo Hannover, uno de los mejores aliados y amigos de mi difunto abuelo, su familia tiene demasiado peso sobre la femf por que es una de las fundadoras y aparte de todo eso es el rey de Belgravia.

—quítate las malditas gafas al menos. —el ministro me habla entre dientes.

—tranquilo. —interviene el monarca. —yo he sido como el... —sonríe.

Acato la orden, dejó que vea mi claro rostro resacoso y espero a que uno de los dos me diga que mierdas pasa.

—verás. No me siento demasiado seguro tras lo que ocurrió hace un par de meses en Estados Unidos.

Intentaron secuestrar a su nieta, alfinal no ocurrió nada por que dos de sus mejores guardaespaldas lo impidieron pero fue una noticia escandalosa para mucha gente.

—y ahora que estamos en plena campaña tendré que estar tres meses fuera para todo lo que se requiere.

No se donde cojones quiere llegar pero no me importa demasiado.

—no te pediría esto si no supiera de tus habilidades y de que eres el mejor coronel que la femf tiene... para que nos vamos a engañar Christopher. —aclara su garganta. —necesitaré que seas el guardaespaldas de Alana durante el tiempo que no esté. Ella vuelve en tres días a Belgravia ya que ha terminado en la universidad y si quiero que seas su sombra. También estaremos en plena campaña monarca allí dado que en la víspera de su cumpleaños será ascendida al trono.