Capítulo 07.

556 106 8
                                    

Taehyung acomodó la cobija alrededor de Jiyoung, cuidando que estuviera bien cubierto antes de salir del departamento rumbo a la guardería. Sintiendo solamente las secuelas de su enfermedad, decidió que era momento de volver al trabajo antes de que su jefe pensara en despedirlo en definitiva. Siempre había sido un trabajador ejemplar, pero ahora tener consigo un bebé de manera inesperada no había estado entre sus planes, aún estaba adaptándose a su nueva forma de vivir.

Agarrando el primer transporte que encontró, mandó mensaje a Jungkook para asegurarle que ya se encontraba en camino y le adjuntó la ubicación en tiempo real, guardando su celular tan pronto como comprobó que los mensajes hayan sido enviados. Sabía que estaba en deuda con el azabache por cuidar de Jiyoung y de él en su día de enfermedad, por lo que recitó mentalmente qué le diría para poder recompensarlo.

Por otro lado, Jungkook leyó el mensaje al tiempo que ingresó a la guardería, apurandose en dejar sus pertenencias en el locker y repasar el itinerario del día. Había entrado una hora más tarde de lo habitual, pero a tiempo para recibir a Jiyoung. Hoseok pasó un lado suyo al mismo tiempo que entró a la pequeña sala de descanso que tenían, buscando un café para rendir durante su jornada.

—Buen día, Jungkook. Pensé que no vendrías el día de hoy.—Comentó acercándose, abrazándolo por los hombros.

—Solo pedí entrar una hora más tarde, de todas formas esa hora siempre la tengo desocupada hasta que Taehyung traiga a Jiyoung, así que decidí descansar un rato más.—Sonrió en su dirección, colocando su mano sobre su hombro antes de moverse por la diminuta cocina en busca de los ingredientes para el café.

—Ya veo, ¿Ya viene en camino?

—Sí, justo me mandó mensaje avisando que venía, así que tengo que apurarme.—Le mostró vagamente la pantalla del celular dónde se mostraba la conversación, guardándolo para terminar de preparar su bebida.

Hoseok no mencionó nada más, entrecerrando los ojos en su dirección al percatarse de la cercanía que tenía su amigo con el padre del bebé. No estaba extrañado ante la amabilidad del azabache con sus casos designados, pero lo que si lograba sorprender era el hecho de preocuparse tanto por él como para irlo a buscar al no saber nada suyo, claro que era humano de él mostrar preocupación si no sabía nada del padre o del bebé, velando por su bienestar, pero ofrecer ayuda y actuar con tanta familiaridad a lado suyo le parecía más allá de un trabajo normal.

Reservó el pensamiento para sí mismo, solo Jungkook sabría el porqué de su comportamiento, y cuando lo descubriera, Hoseok sabía que recurriría a él para contarle todo.

—Tengo trabajo que hacer, suerte en tu día de trabajo, Jungkook.—Con una última mirada, salió del lugar en dirección a la recepción.

Jungkook terminó su café y salió, comprobando en su celular que aún tenía algo de tiempo para asignar un par de actividades más a su itinerario. El tiempo para la llegada de Taehyung le parecía una eternidad, pero cuando las siete en punto marcaron en el reloj de recepción y vió la puntualidad del pelinegro al llegar justo cuando la hora sonó, sonrió ante ese hecho.

—Buenos días, Taehyung.—Saludó tan pronto como logró acercarse, extendiendo sus brazos para cargar al bebé.

—Buenos días, Jungkook.—Entregando en brazos a Jiyoung, sonrió.—Cada día pesa más, sentía acalambrados los brazos.

El azabache soltó una carcajada, negando.—Espera a cuando cumpla su primer año, o a los dos cuando aún quiera ser cargado.

Taehyung fingió un gesto de horror, pero rápidamente lo cambió a uno feliz. Se estaba acostumbrando de manera rápida a la presencia de Jiyoung, y verlo hacerlo planes a un futuro cercano ya no parecía aterrarle como al principio, al final de cuentas no podía verse sin su bebé junto a él.

—Tengo que irme, pero te quería preguntar si tienes tiempo para ir a cenar esta noche, o cuando tengas libre, no tengo problema.—Soltó rápidamente las palabras, desconcertando a Jungkook.

¿Invitarlo a cenar? Su expresión de confusión fue la respuesta de Taehyung para entender que había omitido el detalle de la finalidad de su cena.

—Cuidaste de mí y de Jiyoung, cuando solo era él y no a mí. Quisiera poder agradecerte, ese día me sentía demasiado mal y te quedaste gran parte del día ahí, pero no me dejaste pagarte como un día laborado o poder ayudarte siquiera en el transporte, así que me gustaría que me aceptaras una cena, o puede ser lo que quieras, pero dime una forma de poder pagarte ese día, no tengo ningún problema con lo que digas.

Jungkook balbuceó sin saber qué decir, ¿Una forma de pagarle? Él no había pensado en que el pelinegro siguiera pensando una forma de recompensarle por ese día, lo había hecho con mucho gusto y lo había recalcado una infinidad de veces mientras estaba a su lado, por lo que asumió que el asunto estaba saldado.

Pero si Taehyung insistía, entonces aceptaría.—Está bien para mí una cena, no tengo nada más que hacer saliendo de aquí.

—Perfecto, ¿Tienes pensado algún lugar al que quisieras ir? Sino, podría sugerir un par y ver si te agrada alguno, acaban de aperturar uno en una de las plazas cerca de aquí, por si quieres ir.

—Realmente no me importa el lugar, puede ser donde sea.—Sonrió divertido.

—Entonces me encargaré de ello.—Acomodando su abrigo, señaló detrás suyo.—Es momento de irme, pero te mandaré mensaje para avisarte. Hasta en la noche, Jungkook.

—Estaré al tanto, nos vemos entonces.—Enfocó su mirada en él al tiempo en que se acercó y besó la mejilla de Jiyoung, haciendo que se removiera entre sueños mientras aún descansaba contra el pecho del azabache.

Con un asentimiento, Taehyung salió de la guardería de manera apresurada en busca de un taxi para llevarlo al trabajo. Hasta que no se fue, Jungkook no se apartó de recepción hasta perderlo de vista. Teniendo en mente una cena con el pelinegro, todo el día tuvo una sonrisa en su rostro mientras observaba cada cierto tiempo la hora, esperando con ansias la finalización de su turno, mismo que terminaba cuando Taehyung llegara.

Cuando estaba jugando con Jiyoung con una pequeña sonaja en la habitación destinada para ellos, su celular vibró con un mensaje de Taehyung avisando que había salido del trabajo, mandando su ubicación para saber su trayectoria hasta la guardería.

—Bien, hombrecito. Fue todo por hoy, es mejor que nos apuremos porque papá viene en camino.—Levantándose con el pequeño entre sus brazos, caminó fuera de ahí para alistarse.

That's not how this works | KVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora