Asagiri Gen

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6:32 AM Tokyo, Japón.

Había sonado el despertador hace ya dos minutos cuando por fin decidió levantarse de su cama. Hacía calor ese día, lo que lo hizo sentir desagradable y pegajoso entre las sábanas.

Se desperezó y fue directo al baño de su apartamento. Se miró en el espejo y acomodó un poco su cabellera azabache asimétrica. Era parte de su excéntrico personaje que mostraba al mundo, algo que lo hacía resaltar de los demás.

Se metió en la ducha y abrió el agua fría. Se mantuvo ahí unos segundos hasta que decidió comenzar a enjuagarse el pelo y después seguir con su cuerpo.

Salió de la ducha con una toalla envuelta en él, pero a pesar de la ducha fría seguía sintiendo calor.

Se acercó a su mesa de luz, en donde estaba su teléfono celular y se fijó la fecha en la pantalla.

Si, hoy comenzaría mi ciclo de celo.

Abrió el cajón de su mesa y agarró la tableta de pastillas que se encontraba dentro. Tomó dos supresores y se tiró de nuevo en la cama.

Ya no tenía ánimos para hoy.

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Lo despertó otra vez el sonido de su teléfono, pero esta vez era una llamada.

Sin abrir los ojos, comenzó a seguir el ruido y a estirar la mano en busca del dispositivo. Cuando por fin lo alcanzó, solo apretó con su pulgar en donde creía estaría el botón para cortar. Lamentablemente apretó el de contestar.

–¡Asagiri Gen! ¿Dónde estás?¿Sabes qué horas son?– Reconoció la voz de su representante. –¡Hoy era el día en que ibas a cerrar trato con el canal Makatan para que tengas tú propio programa a las 21:00 hs! El horario con mayor audiencia ¡Gen! Por favor dime que estás en la puerta del edificio. – Se escuchaba desesperado, preocupado.

– Buenos días, Matsu-Chan.– Dijo Gen.

– ¡Gen! ¿No entiendes la magnitud del problema? No estás aquí y tú tienes que firmar para poner en marcha todo el proyecto. – El representante dio una pausa. – Es una gran oportunidad, Gen. Y sabes lo importante que es la puntualidad, lo que acabas de hacer se considera una gran falta de respeto.

Al no recibir respuesta, el representante siguió hablando a través del teléfono.

–Gen. Sé que no faltarías a una reunión tan importante sin una razón considerable. Pero tendrías que haberme avisado y la podría haber pospuesto. ¿Pasó algo, Gen?

Gen se removió entre las sábanas. Se sentía mal por haberle hecho eso a su representante, tenía razón en que podría haberle avisado a este al menos antes de acostarse a dormir.

–Hoy desperté y tuve que tomar la pastilla. Sabes los efectos secundarios que tiene en mí después de tomarla. Me acosté a dormir y no tenía idea del tiempo. Perdón, Matsu-Chan. – De verdad lo sentía, y esperaba haber transmitido bien sus sentimientos por la llamada.

–Está bien, lo entiendo. Intentare convencer al director de posponer la firma de contratos. Cualquier cosa que necesites no dudes en llamarme.– Dijo Matsuda.

–Por supuesto, no te preocupes, Matsu-Chan~. No tengo planeado salir en la mañana ni en la tarde. Nos vemos en el programa de las 19:00 .– Dijo con voz animada para después cortar la llamada.

No podía cancelar el programa de las 19:00 hs. Tenía un invitado, y ese invitado era el Estudiante Primate Más Fuerte; Shishio Tsukasa.

No es que le tuviera miedo o algo, para nada. Antes ya había charlado un poco con él para planear la dinámica del programa, y le sorprendió lo agradable y manso que era a pesar de su aspecto. 

Dᴇsᴘᴇʀᴛᴀʀ ᴏᴍᴇɢᴀ [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora