Entré corriendo al cuarto de baño.
Estaba agitada y acalorada por lo que acababa de pasar.
¿Qué carajos acababa de pasar?
Me recriminé, si no es que me di mil bofetadas mentales por lo que acababa de hacer.
Me miré en el espejo; mis mejillas estaban completamente rojas y todavía podía sentir la embriagante y cálida sensación de su aliento sobre mis labios junto con mis ganas de besarlo.
No podía negar que Felix me encantaba, sin embargo debía mantenerme a raya. Yo puse esa cláusula en el contrato, no podía romperla a la primera oportunidad que tenía de coger con él.
—Tonta, Marinette—susurré.
Era obvio que Felix me deseaba de la misma manera que yo a él, sexualmente hablando, sin embargo no podía perder el control.
No iba a dejar que esto pase de nuevo. Felix era un maldito imbécil que a la primera de cambio volvería a tratarme mal en la oficina por errores sin importancia.
Estaba segura que con la mala suerte que tenía todo este trato se tornaría incómodo y terminaría por explotarme en la cara pronto. Felix estaba desesperado por recuperar a su ex novia, el acostarnos sólo nos llenaría de problemas.
—Tienes prohibido acercarte a él, Marinette—susurré—. No lo deseas.
«Mentirosa.»
Ignoré ese pensamiento y me saqué la ropa para entrar a la ducha.
Dejé que el agua helada calmara cada pensamiento sin éxito. Sólo podía imaginar a Felix y a mí causando un desastre en ese sofá.
«Ya basta, Marinette.»
Salí de la ducha después de varios minutos y me dirigí hacia la sala, jalada por la curiosidad de ver qué hacía él después de lo que casi aconteció entre los dos; no obstante, me sorprendí al verlo durmiendo tranquilo en el sofá.
«¿No le afectó lo que acaba de pasar cómo a mí?»
Estaba sentado, con la cabeza recostada en el respaldo. Se veía tan guapo. Acerqué una mano a su rostro pero me detuve antes de si quiera tocarlo; ¿si lo despertaba qué ocurriría entre los dos? ¿Si no hubiera sido por esa llamada hubiéramos terminado con este deseo?
No. Porque no iba a dejar que vuelva a pasar. No iba a comenzar otro juego para empezar un incendio que sería difícil de apagar. Puse mis reglas porque no quería salir perdiendo, entonces debía ceñirme al contrato.
«Tú puedes, Marinette. Será fácil. 3 meses o menos resistiéndote a uno de los hombres más guapo que has conocido en tu vida.»
Sí, súper fácil.
Solté un suspiro y me di media vuelta con rumbo a la habitación.
Me encerré en esta y me puse una pijama para meterme a la cama. Seguía teniendo calor, y mi mente no dejaba de repetir esos momentos con él o imaginarme en qué hubiera terminado todo de no ser por esa tonta llamada.El alcohol en mi sistema me hizo verlo entrando a la habitación en este instante para terminar con lo que dejamos pendiente. Podía verlo desabrochándose la camisa y sentir su piel estremecerse bajo mis manos.
Apreté las piernas al sentir esa electrizante sensación que clamaba por ser apaciguada.
—Felix...—susurré al imaginarlo justo sobre mí.
Mi respiración se fue tornando más pesada y, no sabía si era porque estaba ebria o porque realmente había perdido la cabeza, pero se sintió tan bien cuando uno de mis dedos acarició mi intimidad con delicadeza.
ESTÁS LEYENDO
Secrets |FELINETTE AU
Fanfiction[+18] Cuando el destino te quiere alejar de alguien o algo en específico te manda señales, sin embargo, a veces él mismo las ignora y te lleva justo donde no deberías estar. Marinette Dupain es sinónimo de mala suerte. Desde que tiene memoria, el de...