𝐍𝐨 𝐞𝐫𝐞𝐬 𝐧𝐚𝐝𝐢𝐞 𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨 𝐡𝐚𝐛𝐥𝐚𝐧 𝐝𝐞 𝐭𝐢...
Una escuela privada, pero no vida privada. Lo que sea que los estudiantes hacen, va directamente a su blog. La desconocida pero escandalosa Gossip Girl, le da problemas a los...
══════════════════════ Arriba y contra ellos, Upper East Siders. Es importante empezar bien el día. ══════════════════════
Jadeé con anticipación cuando las manos de Nate se deslizaron por mi abdomen. Entre sus besos desesperados en mi cuello, su respiración cálida contra mi piel, y su tacto necesitado, me sentía totalmente estimulada.
Justo cuando sus dedos estaban por llegar a donde más anhelaba, la alarma de su teléfono estalló en su dormitorio con un intenso ruido difícil de ignorar.
Los dos suspiramos. Nate se bajó de mi cuerpo y salió del enredo de sabanas, estirando su brazo para tomar su teléfono. Una vez que el molesto ruido cesó, se sentó en el cama y yo aproveché para trepar por su espalda.
— Parece que ya estabas arriba —bromeé.
Nate se dió vuelta, rodeándome con un brazo y capturando mi rostro con su mano.
— Gracias a ti llevo arriba toda la semana.
Solté una risa antes de unir nuestros labios.
══════════════════════ No hay nada peor que despertarse en el lado equivocado de la cama. Excepto, tal vez, despertarse solo.
No puedo esperar a ver lo que nos depara hoy. ══════════════════════
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Serena había decidido regresar a Nueva York después de todo. Esta noche se realizará la gala anual benéfica de la Fundación Central Park y, sorprendentemente, ella va a ser la anfitriona. Al parecer Steven, su nuevo novio, la había ayudado a incorporarse al consejo directivo. Resulta que él también reside en la ciudad.
Puede que a mí jamás me haya interesado, al contrario de lo que hubiera querido mi familia, pero por mis padres tengo entendido que ser la anfitriona de la fundación es muy importante para la alta sociedad neoyorquina. Tanto mi madre como Lily han ocupado ese puesto demasiadas veces, y nos han hecho saber que es casi mejor que ser el alcalde. Es una gran oportunidad.
Por eso, Nate había aprovechado la situación para ser uno de los patrocinadores del evento, viéndolo como una posibilidad para impulsar al Spectator. Primero tuvimos que contactarnos con Serena, arreglar nuestro impasse; pero ella estaba muy dispuesta a olvidarlo, así que no tuvimos que esforzarnos. Parece que de verdad está decidida a comenzar de nuevo, sea lo que eso signifique.
Así que, luego de salir de la cama, los tres nos reunimos camino al trabajo. Nate le dio el cheque a Serena para la gala antes de partir a la oficina, pero yo me quedé con ella bebiendo un café mientras paseábamos para ponernos al día.
— Fue generoso que hayas recogido el cheque en persona —le dije—. Va a ser bueno para el Spectator patrocinar el mismo evento que el Times.
