Atrapado.

80 16 0
                                    


Gogeta se estremeció mientras ahogaba un gemido, sus manos se aferraron más fuerte a los hombros de Vegetto como si su vida dependiera de ello, soltó un suspiro dejando escapar un suave; ah. Cuando la sensación fue demasiado para él, el bastardo se estaba esforzando en darle con todo, sosteniendo sus piernas, tan fuerte que seguramente dejaría marca.

—¿Qué pasa? —menciono en su oído —¿esto no es suficiente para ti?

—Calla. —murmuro, no quería oírlo, cielos su voz siempre hacia algo en él, lo mejor era intentar concentrarse en no gemir, pero las embestidas eran tan rápidas fuertes y precisas que su espalda se arqueo y tuvo que morderse el labio para ahogar un gemido. —lo estás haciendo muy difícil.

—o tú estás siendo demasiado obstinado. —Expreso con un toque de irritación en su voz —porque no solo lo dejas ir ¿eh?

—Ah. —Se mordió el labio apretando fuerte los ojos para negar con la cabeza escuchando un; tozudo. Por parte de la fusión potala. —

—Bien, si así quieres que sea. —le escucho decir, apenas tuvo tiempo de jadear cuando se encontraba contra la cama en cuatro, Vegetto tomó sus brazos creando aros de ki para mantenerlo atados a su espalda abriendo más sus piernas. —mh, pero que buena vista. —lo penetro nuevamente haciéndole sisear. —ya que esto no es suficiente para ti, lo haré hasta que pierdas la cabeza.

—¿eh? —no hubo tiempo a replica cuando Vegetto subió de nivel, ahora estaba en blue dándole con todo, Gogeta se estremeció ante las poderosas embestidas, su mano paso a su pene descuidado comenzando a acariciarlo, sus piernas temblaron ante el poder de Vegetto, se mordió los labios hasta hacerlo sangrar, de sus ojos comenzaron a acumularse las lágrimas debido al placer —

Contuvo sus gemidos lo mejor que podía sin darle el placer de escucharlo, Vegetto gruño sujetándolo del cabello mordiendo su hombro, quería quejarse por la dolorosa y placentera sensación su vista se estaba nublando, mientras Vegetto le susurraba una u otra cosa obscena que su cerebro no podía procesar del todo bien.

Gogeta escucho un jadeo, su mirada borrosa se enfocó hacia el frente la puerta de la habitación había sido abierta, Bulchi estaba allí parada con una expresión horrorizada, Vegetto tomó sus brazos obligándolo a erguirse, levanto su rostro con la otra mano haciendo que él mirara directamente hacia Bulchi, lamiendo su mejilla, ya podía mirar la expresión que le estaba haciendo la fusión potala a ella, Gogeta no pudo más corriéndose, manchando su abdomen con semen dejando escapar un gemido de sus labios, fuerte y sonoro. Bulchi cerró la puerta de golpe.

La fusión metamor se estremeció debido al orgasmo sintiendo como Vegetto aun lo penetraba hasta alcanzar el clímax, hubo un largo silencio hasta que.

—¡Eres un bastardo! —le reclamo, Gogeta luchando para quitarse los aros de ki, si su mente no estuviera del todo ida sería más fácil pero no podía concentrarse —lo hiciste a propósito.

—¿Qué? ¿él que te mirara siendo tomado por mí, gustoso? Eso si lo hice a propósito, ahora que ella se metiera a cuartos ajenos no es asunto mío. —comentó, Gogeta soltó un gruñido mientras Vegetto lo tomaba de la cintura —sé que te gusto que te mirara —expreso con una sonrisa en sus labios —pude sentir como me apretaste y absorbiste mientras ella era testigo de cómo te tomaba para mí. ¿mh? —Susurro en su oído haciendo que Gogeta se estremeciera —Eres un pervertido.

—No soy un pervertido. —protesto —Además, si Gotenks nos hubiera visto ¡Eso sería terrible!

—¿y que si nos ve? Ya no es un niño, es un adolescente hecho y derecho. —Objetó Vegetto —y sabe cosas, al menos lo que hacen esos otros dos en el mundo real —menciono moviendo su mano de arriba abajo haciendo que Gogeta se sonrojara —Gotenks no es tan tonto como para entrar sin tocar la puerta, no como cierta persona.

—Tsk. —Gogeta le envió una expresión enojada que no podía ser tomada enserio por el sonrojo en sus mejillas —

—vamos, hagámoslo frente al espejo, quiero que veas la bonita expresión que hiciste cuando Bulchi entro. Simplemente encantadora. —menciono tomándolo de las caderas, Gogeta se estremeció ante ello, aun así, se dejó arrastrar por Vegetto de manera "renuente" — 

Drabbles VegegogeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora