Capítulo 15: Lo vi

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Buscamos en nuestros bolsillos, Ben  en su mochila, yo  en mis bolsillos traseros sin encontrar nada. Johny movió el  retrovisor para vernos en el reflejo, luego nos preguntó:

-¿Qué es lo que están buscando? ¿Olvidaste algo? Puedo dar vuelta y regresar.

-Ah, no, no olvidé nada. Sólo que no encuentro mi... mi arete. Creo que se me cayó por aquí en alguna parte.

-Ah, bueno, si no lo encuentras te compraré unos nuevos.

-Gracias Johny.

Me regaló una sonrisa y devolvió su mirada al camino. 

Llegamos a la tienda de útiles escolares, Johny aparcó el auto y entramos. Yo me dirigí directamente al pasillo de colores y plumones y Ben al pasillo de paquetes de hojas de colores. Johny fue a ver los artículos de oficina a lado del pasillo de donde estaba Ben. Con una voz natural y discreta llamé a Ben diciéndole:

-oh Dios, Ben ¿Puedes venir aquí? Quiero que veas estos colores.

Segundos después  Ben estaba a mi lado izquierdo, y le dije a regañadientes:

-¿Qué hacemos ahora? Perdimos el maldito dije.

-Lo sé, ahora ¿Qué haremos? Era nuestra única pista. 

-Tendremos que buscar más pistas.

-¿Cómo? ¿De donde? 

-No lo sé... Pero miralos, son hermosos y vívidos.

Ben giró la cabeza y vio que Johny se aproximaba, luego me siguió la corriente:

-No creo, son muy opacos, me gustaría que fueran más brillantes. No los usaré para mi trabajo.

-Entonces debemos escoger unos entre los dos.

Johny se puso  a lado nuestro y viendo las cajas nos preguntó:

-¿Ya encontraron todo?

-Ah, aún nos faltan los colores. 

-Ah, está bien, dense prisa que se hará tarde.

Ben y yo nos dimos la vuelta para ir por los lapices, pero, en ese momento, sentí su mirada en mi nuca quemándome como si fueran láser. Cuando por fin escogimos una caja de colores nos dirigimos a con Johny para pagar. 

Cuando salimos de la tienda, una ráfaga de aire me azotó la cara y el cabello revolviendo lo todo, Ben se rió de mí, dijo a carcajadas:

-¡Parece que un gato y un perro se pelearon en tu cabeza!

Yo sólo respondí con un lindo y amigable puñetazo en el hombro que lo dejó adolorido, pero seguía riendo.

Cuando subimos al auto, me arreglé el cabello, en cuanto me lo quité de los ojos... vi muy fugazmente una cadena saliendo del reposa-brazo. Pero cuando la quise ver con más atención, Johny abrió la tapa del reposa-brazo y desapareció la cadena. Ésta se parecía a... no puede ser... era la cadena del dije. Saqué un plumón de su caja y escribí en mi mano "vi la cadena ahí" luego señalé con la misma mano a donde estaba anteriormente. Ben sólo reaccionó con un gesto seco, se notaba como trataba de ocultar su miedo. Estábamos en un auto con un asesino.


Discúlpenme por no haber publicado la semana pasada, pero no me sentía con ánimos de escribir, por cierto, la semana próxima no estoy 100% segura de que publicaré, pues tendré muchos pendientes que hacer. Pero si tengo la oportunidad, publicaré un capítulo, aunque sea corto... bueno, eso es todo por mi parte el día de hoy, buenas noches.

Mi padrastroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora