Mi padrastro

Capítulo 3: Así pasó...

Un día, papá, Ben, mamá y yo salímos a un parque acuático, nos divertímos tanto que las horas se vieron volando como palomas enjauladas por 2 años, Ben, mi hermano mayor, quien entonces tenía 17 años y yo 14, me cargó hasta el auto, pues yo estaba muy cansada, y mis piernas estaban dormidas de tanto nadar y corretear a mi hermano, todos abordaron el vehículo y partimos, pero el día de diversión sin fin aún no acababa, pues a papá le gustaba que durara, entonces nos llevó a un zoológico, me puse unos tenis sin calcetines, una sudadera y unos shorts y mamá amarró mi cabello mojado con una liga. Ben y yo éramos muy unidos, me cuidaba mucho y me daba mucho amor; me llevó de un brazo corriendo a ver un león enorme, pero viejo el cual apenas podía rugir, luego vimos unos monos y después un sin fin de animales. Luego recorrimos el lugar todos juntos, pero papá se golpeó el hombro con una rama de un árbol y le quedó un moretón. Después comimos unos raspados y vimos fuegos artificiales.

Cayó la noche y ya nos teníamos que ir porque me iba a quedar dormida, entonces subí bostezando al auto y me abroché el cinturón de seguridad, luego subió Ben y se lo abrochó también, luego mamá subió seguido de papá, pero papá no se lo puso pues su moretón le dolía mucho. Partimos y empezó a lloviznar, papá encendió los limpia parabrisas e intensificó las luces. Yo estaba a punto de quedarme dormida cuando... eso pasó... un animal, como una vaca se atravesó en el camino y papá no pudo frenar a tiempo porque el pavimento estaba muy mojado como para frenar en seco, el auto chocó con el animal rompiendo el parabrisas y lanzando a la vaca a mas de 4 metros de distancia.

El auto quedó todo aplastado de enfrente, con sangre empapado de sangre de la vaca. Llegó una ambulancia, mamá se rompió un brazo, Ben se lastimó el cuello y a mi se me fracturó el hombro... pero papá... no llevaba puesto el cinturón... su cabeza chocó contra el parabrisas y su pecho se golpeó con el volante... mamá estaba acuclillada apretándose la cabeza con las palmas de la mano gritando y llorando, Ben estaba tragándose el llanto mordiéndose el labio inferior apretando los puños y yo... estaba sobre mis rodillas sentada en mis talones, sin palabras, viendo a papá ahí... muerto... no podía creerlo... hacía menos de unas 2 horas, estábamos comiendo raspado, riendo y viendo fuegos artificiales, viviendo un momento feliz... y ahora... ese hombre está... muerto, enfrente mío, recordé en ese momento un día que me dijo que me amaba, me agarró a besos y abrazos y salimos a jugar al patio, entonces empecé a llorar lentamente, luego mas fuerte hasta que llore desesperadamente y Ben tuvo que tomarme en brazos y alejarme de ahí, pataleé y trataba de alcanzar a papá con una mano extendida, Ben intentaba calmarme pero no servía, me llevó lejos de ahí y me abrazó muy fuerte y empezó a llorar acurrucándose en mi hombro y me abrazó aún mas fuerte. Nuestro padre había muerto.