Take My Soul [Stefan Gelcem]

2

Moscú, Rusia.

Las puertas de hierro de la mansión Morgan en Rusia se abren frente a mi, dejándome ver la fachada de la magnifica y enorme morada de Regina y Elijah Morgan.

Hay hombres armados por todos lados, y eso me hace fruncir el ceño mientras en las camionetas mis hombres siguen mi Rolls Royce.

El camino de piedra me lleva directamente a la puerta principal, que es inmediatamente abierta cuando me bajo.

-El Coronel la espera en la sala junto a la élite-me informa la mujer y asiento, verificando por última vez que mi arma esté en su lugar antes de comenzar a subir los escalones

El ambiente es pesado, no me gusta, y presiento que hay algo más que Christopher no se atrevió a decirme por teléfono.

Ignoro a los hombres armados, habiendo lidiado con ellos toda mi vida, así que me muevo directamente a la sala de visitas por un camino que ya conozco, pero mis pies dejan de funcionar cuando los veo a todos en medio de una discusión.

Algo sobre bandos, sobre escoger quién está contra Christopher o quién está con él, pero mi sangre se enciende en rabia cuando veo al rubio de dos metros a un lado de Christopher.

Debe ser una jodida broma.

-¿Hola?-hablo, pero todos están demasiado enfrascados en una discusión

Rick James menciona algo sobre Emma con Ilenko, Luisa le grita a Christopher que debieron haberse dado cuenta y mis ojos van a Patrick que... oh, no.

¿Qué diablos pasó?

Intento llamar la atención de nuevo, pero todos siguen discutiendo, así que le hago una señal a Brendan, que se lleva los dedos a los labios y suelta un sonoro silbido que llama la atención de cada miembro de la sala.

-¿Quieren cerrar las malditas bocas?-mascullo-. ¿Por qué mierda están discutiendo?

-¡Lena!-Patrick se apresura a llegar hasta mi, y la fuerza con la que me abraza llega a ser asfixiante si no pudiera sentir su desesperación-. Tienes que ayudarla, Lena-suplica

-¿A quién?-frunzo el ceño, sintiendo mi cuerpo llenarse de preocupación ante la desesperación de mi amigo-. ¿De qué...?

-Antoni-dice y callo-. Nos atacaron, tomó a Alexa y le suministró algo... no sabemos que es, pero está...-traga, sus ojos se llenan de lágrimas y respiro profundo

-Llévame, vamos-tiro de su mano, ignorando al resto de personas mientras Patrick me lleva escaleras arriba

***

-Vigílala-le ordeno a Ronan antes de salir de la habitación, encontrándome de frente con la élite-. Ella... necesito monitorearla y hacerle unos exámenes, no puedo dar un diagnóstico solo porque si.

-¿Crees que pueda recuperarse?-me pregunta Brenda

-Depende de cuánto haya sido el nivel de perversión de Antoni-me encojo de hombros-. Quiere desesperarlos, y sin duda lo logró-miro a Christopher-. ¿Hace cuánto está así?

-Desde que te llamé.

-Bien, Ronan va a encargarse de los exámenes médicos-respiro profundo-. Necesito todo, Christopher. Hay trabajo que hacer.

-Tu laboratorio está en el tercer piso-toma mi brazo, llevándome lejos de la élite-. También necesito que revises a Owen.

-¿Quién?-frunzo el ceño

-Uno de mis hijos...

-¿Hijos?-parpadeo-. Wow, bueno... vaya. Creí que ellos... bueno, ya sabes, la FEMF dijo que habían muerto.

-Eso quieren ellos-me lleva escaleras abajo-. Su sistema tiene Hasse, uno de los relativamente nuevos venenos de Antoni. Iba a llamarte, pero contactar a la esposa de Cilian es...

-Cilian murió-lo corto-. Nadie habla de Cilian-advierto-, ni siquiera tú. Y me debes más de una explicación, Christopher; vas a dármelas después de que me lleves a ver a tu hijo para que pueda examinarlo, gracias.

Me mira por unos largos segundos en los que parece intentar analizarme, así que le dejo ver mi fastidio, lo que lo hace asentir y llevarme por un enorme pasillo hasta las puertas francesas que dan al patio, dónde dos niños son perseguidos por una hermosa pelinegra que sonríe y ríe intentando atraparlos.

-Mellizos-supongo, respirando profundo al verlos, aproximadamente de la misma edad, ambos idénticos a Christopher

Son hermosos. Son pequeños muy muy hermosos.

-Lo son-asiente, apoyando su mano en mi espalda-. Niños-los llama, y mis ojos vuelven a fijarse en la mujer, que mira de Christopher a mi con una evidente molestia brillando en sus ojos-. A Owen no le gusta que vean sus ojos, y usa un inhalador.

Asiento, guardando la información en mi cabeza, pero los ojos enfadados sobre mi comienzan a fastidiarme en sobremanera.

-Aparta tus manos, no necesito a una Sabrina 2.0 atacándome-siseo y ríe antes de quitar su mano de mi espalda, agachándose a cargar a la pequeña mientras me agacho a la altura del niño

»Bueno, es idéntico a ti-paso por alto los lentes de sol del pequeño, sonriendo al ver un poco de sus facciones-. ¿Cómo te llamas, cariño?

-Owen-murmura, intentando bajar la cabeza, pero tomo su barbilla para que no lo haga

-Vaya, ese es un bonito nombre-le ofrezco una dulce sonrisa-. Owen Morgan, si... muy bonito-le guiño un ojo y sonríe-. ¿Sabes? Soy buena amiga de tu papá, y él me llamó porque cree que puedo ayudarte con algo que te molesta-me siento en el césped-. ¿Qué crees que es eso?

-Mis... ¿ojos?-su voz pierde seguridad

-Quizás-me encojo de hombros-. ¿Me dejas verlos? Si son parecidos a los de tu padre, seguro que serán fantásticos.

Niega, así que respiro profundo asintiendo lentamente.

»Eso está bien, ¿hay algo más que te moleste?-tanteo, y lleva una de sus manitos al bolsillo de su pantalón, mostrándome un inhalador-. Oh, es muy cool, pero un poco fastidioso para los que deben usarlo ¿no te parece?

Asiente.

-Damon Mascherano contribuyó un poco en eso-dice la mujer-. Y Uda, antes de... lo que pasó.

-Sé lo de Uda-asiento-. Ella es... fue-me corrijo-, fue una amiga cercana en su momento, cuando éramos solo los tres-señalo a Chris antes de extenderle la mano a la mujer-. Ayleen Volkova.

-Rachel de Morgan-parpadea-. Y te conozco, Reece Morgan habló mucho sobre ti.

Asiento, intentando controlar mi expresión ante la mención del nombre de mi mentor y la mejor persona que pude conocer en toda mi vida.

-Me alegro de que hayas tenido la suerte de conocerlo-carraspeo antes de levantarme-. Christopher me habló de ustedes, ¿quieres venir? Voy a hacerle una corta revisión a Owen.

-Por supuesto-respira profundo antes de mirar a la pequeña-. Ella es Milenka, y quizás también quiera venir con nosotras.

-¿Eres amiga de mi papá?-pregunta, con sus ojos llenos de curiosidad, con un azul poco distintivo de los Morgan, pero que al ver a Rachel me confirman que son de su lado

-Así es-asiento, ofreciendo mi mano a Owen, que tarda unos segundos antes de tomarla

-Voy con ustedes-se extiende hacia su madre y ella sonríe, besando su frente cuando la toma en brazos mientras caminamos de vuelta al interior de la mansión-. ¿Conoces a mis abuelos? ¿Y a mis tíos?-me pregunta

-Oh, si, y tengo muchas historias divertidas-le guiño un ojo y ella sonríe complacida

-Me caes bien-asevera y río

-Me alegra.