Poemas De Una Mente Cansada.

Miedo

Qué miedo.
Qué miedo no poder dejar de pensar en tí.
Sacarte en cada tema de conversación.
En cada poema.
En cada sueño.
En cada pensamiento.
¡Sal ya de mi cabeza!
¡Ocupas todo lo que me rodea!
Me asusta.
Sé que no puedo depender tanto de alguien.
Pero oh dios, tu sonrisa.
¿Como vivo tranquila si solo espero tus mensajes?
¿Como me concentro sabiendo que con un movimiento tuyo puede caerse mi mundo?
Que me tienes en tus manos y no lo sabes.
Me asusta el no ser dueña de mi propio destino.
Que tu amor aguante el muro que retiene mis lágrimas.
Y no soy capaz de pensar mas que en el encaprichamiento que por tí siento.
Que miedo.
Que miedo el depender de tí para ser feliz.
Que miedo el escucharte en la letra de cada canción que reproduzca.
Y si es una sinfonía, te oigo en los tonos de su melodía.
El caso es que no sales de ahí arriba.
Ni de aquí dentro.
Que miedo estar enamorada... ¿Obsesionada?
Que miedo el saber que si pudieras leer esto te extrañarías... Te asustarías.
Pero es que me gustas tanto...
Que me asusta.
Me aterra.
Por que me siento debil y frágil.
Desnuda ante la intemperie como el árbol que crece en la adversidad.
Como la mala hierba arrancada de cuajo por el viento.
Por que me paso el día enfadada, feliz, o triste; pero siempre eres tú la causa.
¿Y qué me queda si pierdo esa voluntad por la que tanto he luchado...?
Si dejo de ser una mujer libre para cambiar mis emblemas por cadenas oxidadas...
En mis muñecas y tobillos.
Pero me rehuso a dejar de perseguirte.
Así que en esa intemperie reflexionaré.
Y diré, si el viento no se lleva mis palabras;

"Qué miedo."