cap.11

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Después de un largo día de estar en el centro comercial, y de llegar a la casa de luzu, era momento de que quackity buscará salidas o alguna forma de comunicarse con spreen.

Decidió comenzar a entrar a todas las habitaciones que había.

Con cautela, Quackity empezó a inspeccionar los cajones y armarios cercanos. Encontró algunos objetos cotidianos como llaves, cuadernos y fotografías antiguas. Sin embargo, nada parecía ser útil para su situación actual.

Decidió explorar el resto de la casa en busca de alguna oportunidad de escape. Cada paso que daba resonaba en el silencio opresivo del lugar.

A medida que avanzaba, Quackity notó que las habitaciones estaban decoradas de manera extraña y macabra. Las paredes estaban cubiertas de pinturas perturbadoras y había estatuas inquietantes dispersas por todas partes. La atmósfera era asfixiante y le daba una sensación de escalofrío constante.

Después de explorar varias habitaciones sin éxito, Quackity llegó a una puerta cerrada con llave. Sabía que detrás de esa puerta podría encontrar respuestas o incluso una forma de comunicarse con Spreen. Buscó las llaves que había encontrado anteriormente y, para su sorpresa, una de ellas encajaba perfectamente en la cerradura.

Al abrir la puerta, Quackity descubrió una habitación llena de equipos electrónicos y monitores. Parecía ser el lugar donde Luzu vigilaba la casa. Con esperanza, Quackity buscó desesperadamente un teléfono o cualquier dispositivo que le permitiera contactar a Spreen.

Finalmente, encontró un teléfono oculto detrás de uno de los monitores. Rápidamente, marcó el número de Spreen y esperó con ansias que respondiera. Después de varios tonos, Spreen contestó al otro lado de la línea, mostrando alivio y preocupación al mismo tiempo.

-- ¿Hola, quién habla?

-- ¡Spreen! soy quackity, que bueno que contestas...

-- ¿Pato?

-- Si, soy yo

-- ¿Cómo se que ésto no es una trampa?...

-- ¿Porque te mentiría yo oso?...

-- ¡Patito! ¡En serio sos vos! no sabes lo preocupado que estaba por ti...

-- Lo se... Pero estoy bien no te preocupes

-- ¿Te hizo algo ese enfermo?

-- De momento no

-- Que alivio ¿Sabes en donde estás?

-- En estados unidos, específicamente en California...

-- ¿Porque mierda te llevo hasta allá?

-- No lo sé, pero ahora estoy en su supuesta casa...

-- ¿Sabes en donde queda?

-- Si, cuando me traían me fije por las ventanas, y vi los nombres de las calles

-- Muy bien patito, rápido, dime la ubicación

Quackity le pasó rápidamente la ubicación y le pidió ayuda para escapar. Spreen prometió hacer todo lo posible para encontrarlo y rescatarlo. Mientras tanto, Quackity sabía que tenía que ser cauteloso y no darle a Luzu ninguna señal de que estaba tratando de escapar.

-- En unos días iremos para allá, no te preocupes

-- Gracias spreen...

-- No es nada, cuídate -Y así colgaron la llamada.

Con el corazón lleno de esperanza y determinación, Quackity continuó explorando la casa en busca de más pistas mientras esperaba el rescate. Sabía que el tiempo estaba en su contra, pero también sabía que no iba a rendirse fácilmente. Su única meta era reunirse nuevamente con Spreen y poner fin a esta pesadilla.

Te fuiste y llegó alguien mejor | spreeckity Donde viven las historias. Descúbrelo ahora