Entre Luces y Sombras

Diciembre sin tí duele, abuelo

Diciembre ya nunca será como antes, ya nunca volverá a ser igual, los días siguen corriendo y el tiempo no se ha detenido, pero yo sí, yo no puedo seguir, mi reloj se detuvo cuando deje de escuchar tu voz, yo sigo estancada en ese 6 de diciembre del 2020, sigo estancada en el día que escuché que te habías marchado en un largo viaje, en un viaje del que no hay regreso, la muerte.
Ella jugó a ser tú amante aunque te rehusabas, ella juró vengarse y cuando nadie la veía, ya te había llevado de entre nuestros brazos, fué ahi que tus ojitos se cerraron sin darme la oportunidad de despedirme de ellos,y hoy, hoy me encuentro buscandote en cada persona, resistiéndome a pensar que aún sigues aquí, que no te has ido, pero es mentira, todo eso es mentira, porque ya no estás, y jamás regresarás.
Cada mañana todavía me parece escuchar tus peleas, al mirar aquel portal aún podría jurar que estás ahí, en tu taburete, que estás ahí como si nada hubiera pasado, como una fotografía que mis ojos tomaron y se niegan a ver qué la realidad, es que hace mucho que ese rinconcito está vacío y lleno de telas de araña, que hace mucho ese rinconcito perdió su brillo y su color, porque desde que no estás, nadie nunca más lo ha llenado de amor.
Ya van tres años, tres años y sigo sin aceptarlo, sigo sin poder abrir los ojos sin llorar este día, sigo con fuego quemándome el pecho, sigo sin entender que ya no podré llamarte abuelo, si lo hubiera sabido antes, ¡Si tan solo lo hubiera sabido antes!, te hubiera dicho muchas te quiero, pero ahora, ahora esas palabras se me atoran en la garganta queriendo salir, me queman, me arden, pero nunca podrán salir, porque ya no las vas a recibir.
Te extraño, te extraño tanto que duele, duele demasiado y dudo que algún día este dolor cese mientras viva en este mundo malvado.
El luto no lo llevo en mi cuerpo, no lo llevo en mi ropa, no lo llevo en mi rostro, lo llevo por dentro, voy sonriendo como si nada pasará, como a ti te gustaba, voy sonriendo porque no querías que llore, lo sé, pero nadie sabe que por dentro soy una casa vacía llena de monstruos, y el monstruo de tu ausencia me asecha a cada segundo de cada día, yo lo ignoro, escapo de él, pero hoy no, hoy no, está día no puedo, este día dejo que me abrace para soltar unas cuantas lágrimas, para soltar en poesía lo que no puedo decirte desde entonces, para decirle al papel lo que no puedo decirte a ti.
Abuelo querido, cuando te amo, cuánta falta me haces, porque aunque eras un poco distante, yo, yo te quería y el remordimiento de no haberlo dicho antes de tu partida, me consume la poca alegría que me causan tus recuerdos bonitos.
El frío de Diciembre no tiene sentido sin el calor que emanaban tus brazos, y las mañanas ya  no son las mismas sin el café de tus ojos , si tan solo volvieras para abrazarme, si tan solo volvieras un segundo a mi lado, si volvieras a dedicarme una de tus traviesas sonrisas, se que este órgano vacío que palpita mi sangre se volvería a llamar corazón.

Te extraño y seguiré haciéndolo, Diciembre sin ti, nunca será igual, Diciembre duele y nunca dejará de doler, porque en cada día de este maldito mes, vive presente tu recuerdo en mi memoria y como si fueras a escucharme, como si fueras a escucharme, no puedo dejar de repetirle al viento, te extraño y te amo, querido abuelo..

Mare