•𝘊𝘩𝘢𝘱𝘵𝘦𝘳 𝘴𝘦𝘷𝘦𝘯𝘵𝘦𝘦𝘯 𝙁𝙄𝙉𝘼𝙇

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—Oh, Jinnie~

—No hagas ruido, mi madre nos escuchará.

Hyunjin tomó fuertemente las caderas de su ahora novio, comenzando a moverlo en círculos sobre su regazo, mientras Minho besaba el cuello del pelirrojo, a su vez, jadeando por sentir la creciente erección del menor restregarse contra su culo. Ambos se extrañaban de todas las maneras, y se lo estaban demostrando.

—Hyun, te dije que fuéramos a mi departamento-ooh~ —Hyunjin metió sus manos bajo la camisa de Minho, yendo directamente a sus pezones.

—No podía esperar para tocarte, bebé.

Minho se sonrojo escandalosamente por el apodo. Cómo apenas iban comenzando su relación, aún no se habían llamado por apodos lindos, hasta ahora. Eso lo hacía feliz, le hacia feliz el hecho de ya poder ser oficialmente el novio de su pelirrojo, éste se sentía igual de feliz, por fin podrían estar juntos.

De un movimiento, Hyunjin hizo que ahora se encontrará entre las piernas de Minho, éste se sorprendió, iba a rechistar, pero el pelirrojo lo calló con un apasionado beso, lleno de amor, pero a la vez de lujuria. Los jadeos de Minho se atrapaban en ése beso, y aún más cuando Hyunjin comenzó a mover sus caderas, restregando su pene contra el culo del pelinegro, haciéndolo desesperar un poco, y eso se notaba, pues Minho apretaba sus manitas en el cabello rojo del contrario, mientras también se restregaba desesperadamente contra su erección que ya dolía, y si seguía así, se correría en sus pantalones.

—Honnie —tomó las caderas contrarias fuertemente, deteniendo sus movimientos—, tranquilo, corazón.

—Ah-ah.. Hyunjin.. —el nombrado comenzó a desvestir bajo la atenta mirada de su novio, dejandole ver su marcado abdomen y su palpitante erección.

Tomó su pene con una mano, mientras miraba al pelinegro de manera juguetona.

—¿Lo quieres, cariño? —Minho asintió—. Bien, pues ven y tragalo.

Hyunjin pensó que Minho se la chuparia, pues eso quería el. Pero el pelinegro tenía otros planes. Se quitó la ropa con desesperación, y sorprendió a Hyunjin cuando se puso en cuatro, restregando su culo contra el pene erecto del pelirrojo.

—Jinnie.. Ya metelo~

—Honnie.. —apretó sus nalgas con fuerza, recibiendo un gemido gustoso cómo respuesta—. No quiero lastimarte.

—N-no importa, hazlo —recibió una fuerte nalgada, gimiendo nuevamente más por placer que por dolor.

—¿Ahora dando órdenes? —alineó su pene en el agujero de Minho—. Bien, lo que la princesa pida.

—¿Princesa? ¡Amgh! —Hyunjin introdujo toda su longitud de golpe en la estrecha entrada de Minho, haciéndolo gemir fuertemente.

Minho no iba a mentir, le había excitado mucho que Hyunjin le llamara por un pronombre femenino, hasta el punto de mover sus caderas, buscando más contacto con el pelirrojo.

—Mírate —se burló—. ¿Tanto te gustó qué te llamará princesa?

—S-si.. —estaba tan metido en su mundo, que ni siquiera sabía que decía.

Hyunjin rió y comenzó a dar estocadas fuertes y rápidas, profundas, escuchando los hermosos gemidos de su novio, y las hizo más fuertes para intentar encontrar su punto dulce. Al encontrarlo, recibió un gemido agudo cómo respuesta, y no se detuvo, siguió al mismo ritmo sólo para escuchar los lindos gemidos de su hermoso chico.

—Oh~ Jinnie.. Sé más gentil.

El pelirrojo salió del mayor y le dio la vuelta, deleitandose con la hermosa vista que tenía. El chico estaba completamente sonrojado, sus labios levemente abiertas, jadeantes y completamente rojos e hinchados debido a haberlos mordido. Su cabello pegado a su frente, sus ojos llorosos y todo su pecho y cuello con algunas marcas que Hyunjin había hecho anteriormente. Simplemente perfecto ante los ojos del menor, amaba esa imagen del chico, o bueno, amaba todo de él. Se fijó detalladamente en las expresiones que hacia cuando fué entrando nuevamente, pero esta vez más lento para ver perfectamente lo que Minho hacía.

•𝘚𝘰𝘳𝘳𝘺! 𝘐 𝘭𝘪𝘬𝘦 𝘺𝘰𝘶𝘳 𝘣𝘳𝘰𝘵𝘩𝘦𝘳 ᴴʸᵘⁿʰᵒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora