•𝘊𝘩𝘢𝘱𝘵𝘦𝘳 𝘰𝘯𝘦

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Hola, mi nombre es Lee Minho, universitario que tiene hormonas de adolescente al cual le gusta que le den duró, si, así soy yo.

Estudio arquitectura. Tengo 21 años, por lo tanto, llevo almenos 3-4 años estudiando esta carrera, que si lleva algunos varios años, pero me gusta, y no me pesa llegar a graduarme obviamente a los 24 años si así se necesita, amo venir a la Universidad, no sólo por estudiar, sino por otra razón.

Y ahí está mi razón.

-¡Hyunjin! -grite a todo pulmón cuando vi al pelirrojo pasar por el campus, y el me miro con esa sonrisa encantadora que me vuelve loco.

Hwang Hyunjin es el chico que siempre me ha gustado tanto, lo conozco desde la prepa y desde que lo vi, me tiene como un loquito por él. Estudia Arte, es simplemente perfecto.

¿El problema? Si, ahí viene el pequeño problema.

-¡Minho! ¡Hola! -gritó la chica, acercándose a mi junto a su hermano.

Hwang Yeji, sé que a ella le he gustado desde que empezamos la Universidad, por lo tanto Hyunjin nunca se fijaría en mi, por el bien de su hermana.

Yeji es un año mayor que yo, mientras que Hyunjin es un año menor.

-Hola, Noona -respondí de manera amable, haciendo una pequeña reverencia como saludo.

-¡Ay! No seas tan educado, ¡ven! -me abrazó fuertemente, según ella, para saludarme.

-Noona, déjelo, lo va a asfixiar -dijo Hyunjin, divertido.

Esa sonrisa, esa maldita sonrisa encantadora y perfecta, me hace perder el aliento.

Yeji me soltó, pero eso no quita que aún seguiría pegada a mi, gracias a Dios, sus clases ya comenzarían, y nos dejaría un rato a mi y a Hyunjin solos.

Noona me cae bien, pero sólo la veo como una querida amiga, por la misma razón de que soy Gay, y orgullosamente lo digo, pero Yeji Noona no lo entiende.

-Ya me voy, chicos, ¡tengo que ir a clases, adiós! -dijo mientras corría a su salón.

-Adiós Noona -dije, y escuché que mi amado Hyunjin había dicho lo mismo.

Estar a solas con el perfecto de Hyunjin, Dios, me pone tan nervioso, me imagino escenas tan románticas como a la vez tan eróticas, escenas que ojalá un día se cumplan.

-Hyung -me llamó Hyunjin, con esa voz varonil que tanto me encanta-. ¿A qué hora son tus clases?

Sólo me quedé callado por un momento, imaginando que tanto me podría decir con esa voz.

-Oh -reaccione-. Son en una hora.

-Bien, es suficiente tiempo para ir a comer, ¿vamos?

Asentí felizmente para seguirle el pasó, pues sus piernas son algo más largas que las mías, así que obviamente camino más lento. Pero no importa. Aveces siento que, el me espera, y trata de caminar más lento sólo para dejar que yo lo alcance.

Llegamos al estacionamiento de la Universidad, yo no tengo carro o algún vehículo, por lo que pensé que iríamos en la moto del pelirojo que tanto me encanta.

-Suba, Hyung -me dijo cuando ya se había subido al vehículo, y me extendió un casco-. Ponte ésto.

Hice caso a todo lo que me dijo, por así será siempre, si ese hombre me pide que le chupe las patas, con gusto lo haré. Aunque debo admitir que me dan miedo las motocicletas.

Me aferre fuertemente a la cintura de Hyunjin, agarrandome de su ropa para evitar caerme. Si, soy un miedoso de primera, y ésto hizo reír a Hyunjin. Que risa tan perfecta.

-Tranquilo, Hyung, no se caerá.

Arrancó la moto, y a mí casi me da un paro cardíaco cuando lo hizo.

-Iré despacio, no se asuste.

Diosss, ¿ya dije que me encanta esté hombre? Lo diré otra vez, me encanta.

Se veía tan sexy manejando la moto. Su cabello rojo y sedoso volando en dirección hacia el aire, sus venosas y perfectas manos agarrando el manubrio, y no pude ver toda su cara, pero lo que podía ver, al parecer estaba frunciendo el ceño, concentrado en el camino. Simplemente perfecto.

-Llegamos -anunció mi amor prohibido, estacionando la moto.

Baje de ella tambaleandome un poco, y me quité el casco, Hyunjin hizo lo mismo.

-Deme el casco, Hyung, yo lo llevó.

-No, no. Lo haré yo, tu ya llevas el tuyo.

-No importa -me quito el casco-. No me gustaría que Hyung cargará mis cosas.

Hombre perfecto.

Entramos al lugar, nos sentamos en alguna mesa, quedando uno frente al otro, y pedimos lo que queríamos cuando el amable mesero se acercó, para después irse con nuestro pedido.

-Hyung -me llamó-. ¿A usted le gusta alguien?

Si, me gustas tu, me encantas, me fascinas. Ámame, follame, hazme tuyo de todas las maneras posibles.

Puede que parezca que estoy exagerando, pero enserio estoy loco por este hombre.

-Uhm.. No, nadie -respondí con simpleza.

-¿Enserio? Digo.. Se que usted tiene otros gustos, pero esta Noona..

Ahí va, sacando tema de su hermana.

Si, ya me quedo en claro que tu no me quieres, gracias, Yeji Noona.

-Ella es una chica linda, Hyung, ¿no le interesa?-preguntó-. ¿O le interesa alguien más realmente?

Tú, imbécil.

-Oh, mira, ya viene nuestra comida -dije tratando de evadir el tema.

Hyunjin solo me asintió, al llegar nuestro pedido, ambos comenzamos a comer en silencio.

-Oiga Hyung -rompió de repente el silencio.

Lo miré teniendo un gran bocado en la boca, por lo tanto mis mejillas anchadas, mientras masticaba la comida.

Hyunjin rió, y negó con la cabeza.

-Nada, solo que estábamos muy silenciosos.

-Hyunjin -le llamé -. Te he dicho que no uses tantos honoríficos conmigo, solo te ganó por un año, además, hay confianza.

-Si.. Pero lo hago por respeto, Hyung.

-No es necesario -me encogi de hombros.

-Entences, ¿cómo te llamo?

-Por mi nombre, tontito -sonreí, enserio es algo tonto, pero me encanta.

-Te llamaré Honnie.

No te sonrojes, Minho, no te sonrojes.







Kheee
Una nueva historia Hyunho, ¡qué emoción!
Pensé en hacerla Hanknow.. Pero terminé por también hacerla Hyunho.

Byee💗.





•𝘚𝘰𝘳𝘳𝘺! 𝘐 𝘭𝘪𝘬𝘦 𝘺𝘰𝘶𝘳 𝘣𝘳𝘰𝘵𝘩𝘦𝘳 ᴴʸᵘⁿʰᵒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora