CAPÍTULO 10: Reconciliación

492 45 31
                                    


Los días después del incidente fueron extraños tanto para Jude como para Nico. Aunque ambos intentaban fingir demencia y actuar con normalidad, había una tensión palpable entre ellos. Cada vez que se cruzaban en el gimnasio, sus miradas se encontraban y luego se desviaban rápidamente, como si el contacto visual prolongado pudiera revelar demasiado.

Los roces discretos durante el entrenamiento se volvieron más frecuentes. Un toque accidental aquí, un empujón ligero allá. Cada contacto físico parecía cargar con un significado más profundo, una disculpa no dicha, un deseo no expresado.

Ambos preferían hacer de cuenta que nada pasó. Era más fácil así, menos complicado. Pero la verdad es que el incidente había cambiado algo entre ellos. Había una brecha, una distancia que no estaba allí antes. Y aunque intentaban ignorarla, estaba constantemente presente, un recordatorio silencioso de lo que había sucedido.

Jude se encontraba a menudo pensando en Nico, en su sonrisa, en su risita ridícula, en su tierna cara de dormido mientras tomaba un mate a la mañana, en la forma en que sus ojos se iluminaban cuando hablaba de algo que le apasionaba, como cuando se ponía a soñar despierto con ganar la Champions, los dos juntos y armaba escenarios de lo que harían si eso pasara. En la admiración que denotaba en su voz y su mirada cuando decía que él (Jude) ganaría si o si el Balón de Oro.

Y cada vez que lo hacía, sentía una punzada de culpa.

No sabía bien porque Nico se había distanciado en un principio, pero el realmente había manejado pésimamente la situación. Había dejado que sus celos eh inseguridades tomaran control de sus actos, le había hablado de forma hiriente aunque no fuera su intención y había actuado de forma impulsiva, sin pensar en las consecuencias. Y ahora se sentía horrible.

Por otro lado, Nico también luchaba con sus propios sentimientos. Se sentía raro y confundido, pero también extrañaba a Jude. Lo extrañaba demasiado, el viajar juntos antes y después de los entrenamientos, el ir sentados juntos mirando sus series en el micro, el quedarse a comer en su casa, sus chistes internos, su camaradería, la forma en que Jude siempre sabía cómo hacerlo reír, en cómo lo protegía.

Él realmente quería que todo volviera a ser como antes, quería correr a los brazos del mayor, pero por otro lado, que había sido lo del otro día? Jude lo había besado, aún no podía creerlo, pero había ocurrido. Y Jude le había hecho una escena de celos? ¿Estaba él celoso de su amistad con Arda?
No iba a mentir, pensar en eso pintaba una involuntaria sonrisa en su rostro, no quería, pero era inevitable que una pequeña llama de ilusión se encendiera en él, acaso Jude realmente sentía cosas más allá de la amistad por él? Por momentos Nico había sentido que el mayor no era tan indiferente a él como creía, pero pensaba que tal vez se estaba sugestionando a sí mismo por sus propias ganas de ser correspondido, pero ese beso tenía que significar algo más no?

De todos modos, Jude parecía querer pretender que nada había ocurrido y ni siquiera se había acercado a hablar con él, quizás se arrepentía de lo que habían hecho, y eso le rompía un poco el corazón. Por otro lado, de a momentos parecía querer buscar contacto físico con él, como si también lo extrañara. No sabía bien cómo continuar.

En el fondo ambos sabían que no podían seguir así para siempre. Tenían que enfrentar lo que había pasado, tenían que hablar.
Y así, al finalizar el entrenamiento, Jude decidió dar el primer paso y hablar con Nico.

El aire estaba cargado de tensión cuando Jude se acercó al rubio después del entrenamiento. El sol se estaba poniendo, bañando el campo de entrenamiento con un resplandor dorado. Podía sentir el sudor frío en su frente, no por el entrenamiento, sino por la conversación que estaba a punto de tener.

–Nico– comenzó, su voz temblaba ligeramente. El menor se volvió hacia él, su expresión era indescifrable. –I need.. necesito hablar contigo– el otro asintió, su mirada se suavizó un poco.

Jude tomó una respiración profunda, tratando de calmar los nervios que amenazaban con consumirlo. –Lo siento– dijo finalmente –I'm sorry for my behavior the other Day, well, the last few days, and... for what happened in the locker room... the kiss–
Jude podía sentir su corazón latiendo en su pecho, cada palabra que decía parecía pesar una tonelada.

–I don't know what heppened to me, I really...– continuó el moreno sin saber bien qué decir, su voz apenas un susurro –It was my mistake, it will not happen again, please forgive me–
Miró a Nico, esperando alguna reacción, pero el rubio simplemente se quedó allí, en silencio.

–I don't want us to be upset with each other, you're my friend... my mate– dijo Jude, su voz llena de sinceridad. –I miss you, I don't want us to be apart, and I don't want this to ruin our friendshipp– podía sentir que su voz se quebraba un poco, pero se contuvo. No quería que Nico lo viera así.

Nico finalmente habló, después de intentar procesar las palabras de Jude "fue un error" "no volverá a ocurrir" "no quiero que esto arruine nuestra amistad" era de esperar, ya sea que Jude sintiera algo más que amistad hacia él, sea atracción o lo que fuera, no iba a ir más allá, era entendible. Era un beta, incluso si Jude sintiese algo por él jamás arriesgaría su carrera. Aún así eso no hacía que doliera menos, sus pequeñas y absurdas ilusiones haciéndose añicos. Lo que pasó en el vestuario había sido un desliz, algo que no debía pasar y de lo que el otro se arrepentía. Debía aceptar su lugar, por muy difícil que fuera, era lo que tocaba.

–Yo también te extraño, Jude– contestó con voz suave, tratando de ganarle al nudo que se había instalado en su garganta –Y acepto tus disculpas, yo tampoco quiero seguir así contigo, amigo– contestó, remarcando un poco la última palabra.

Jude sintió un alivio inmenso al escuchar esas palabras, aunque sí era sincero ese "amigos" no le sentó del todo bien, pero así es como el lo había querido no? Nada de que quejarse. Podían volver a su relación de antes, sabía que quizás no habían hablado todo lo que tenían que hablar, pero por ahora, eso era suficiente.

ExceptionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora