More that a headache. [KaiSoo/ChanBaek.]

Capítulo 2: ¿ChanYeol?

KyungSoo ya estaba en su trabajo como todos los días, junto con su amigo Baek, quien tenía una sonrisa más grande que la del gato de Alicia en el país de las maravillas. Daba miedo.

Estaba agotado, no pudo dormir bien porque el tonto de BaekHyun dijo que se relajaría y no gritaría más, y lo siguió haciendo. KyungSoo no entendía a qué se debía la felicidad de su amigo, pero gracias a eso él tenía unas ojeras más notorias que las del chico nuevo, llamado Tao. Suspiró y caminó hasta su oficina, tenía que leer las futuras misiones y también en qué sentido debía entrenar a los nuevos. Era estúpido, muy estúpido; los nuevos ya tenían entrenamiento. ¿Qué más necesitaban saber?

— ¿KyungSoo...? —Habló un chico detrás de él, algo dudoso.

— ¿Qué sucede? Tú, eh...—Trató de recordar el nombre del chico alto y de orejas bastante grandes.

—Soy ChanYeol, un gusto. Me dijeron que primero empezarías entrenándome a mí. Aunque, no es tanto un entrenamiento, sólo debo saber dónde están...

El más alto fue interrumpido por el más bajito.

—Sí, entiendo. Las armas, la ropa, y todo eso. No pensé que sería uno por uno. —Eso significa...Que BaekHyun tiene que estarle mostrando los equipos a Kai y Tao. Esto no puede ser más perfecto.

Pensó y sonrió con satisfacción, su día sería perfecto.

—Sígueme.

El más bajito le mostró al chico de orejas grandes todo los implementos que son utilizados en las misiones. Desde armas, hasta automóviles y equipos de vuelo; como aviones, helicópteros, etcétera.

— ¿Cuántos años tienes?, ¿dieciocho? Eres muy joven para trabajar acá, en serio.

¿Joven? Él también lo era, ¿quién se creía éste?

Uno, dos, tres. KyungSoo, respira por Dios.

—No. Sobrepaso los veinte años de hecho. Igual que tú.

El joven frente a él abrió sus ojos, totalmente sorprendido.

— ¡Wow! Es increíble lo joven que te ves. Me agradas, seamos buenos amigos, no solo compañeros de misión.

ChanYeol tomó la mano del más bajito. KyungSoo abrió los ojos, esto era extraño.

— Aceptaré... Pero no arruines las misiones, o te irá mal.

ChanYeol lo abrazó, demasiado fuerte. Esto era extraño y no se podía asimilar bien. ¿Cómo un agente, con un entrenamiento estricto y duro, podía estar abrazando a otro? No lo comprendía, KyungSoo no entendía nada. Se separó y palmeó el hombro del chico más alto.

—Sin abrazos en la hora de trabajo, ni en misiones. Tal vez cuando salgamos a tomar algo, pero eso no sucede, estoy demasiado ocupado siempre. Lo siento.

Estaba dispuesto a salir de ahí, era incómodo estar con el de orejas grandes. No sabía qué intimidaba más, su carácter demasiado pegajoso como el de una goma de mascar, o sus orejas.

— Se me olvidaba, Kai te espera ahora, para que le enseñes todo sobre las misiones y ese tipo de cosas.

Mierda.

El buen día de KyungSoo había acabado.

Es muy corto, lo sé. Pero no sabía si agregar algunas cosas y así. 

Bueno, ¡Gracias! ❤