Parte 3

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—¿Ahora que hizo Tom? – Preguntó Rachel rodando los ojos

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—¿Ahora que hizo Tom? – Preguntó Rachel rodando los ojos

Su amiga llegó con mirada triste y solo podría ser una persona el causante

—Me dijo Tom que pasaría el fin de semana con su... amante – apretó sus labios para aguantar un sollozo

Ni siquiera sabía si era correcta esa terminación, no se contuvo al sentir los brazos de Rachel rodearle en un abrazó

—No pienses en eso Lisa, piensa en que el lunes verás al dios griego de Henry – trato de bromear a lo que ella solo le respondía con una sonrisa triste

Se desvió a su lugar de trabajo y empezar hacer arreglos florales para distraer su mente, mientras ella sufría por su esposo, Henry no dejaba de pensar en esos ojos grises que lo tenía ansioso por verlos de nuevo, había llegado ligeramente media hora tarde al trabajo, sorprendiendo a todos por su retraso

¿Será que le pasó algo malo?

¿Quizá sea que ya tiene una mujer?

Ese tipo de preguntas recorrían entre sus empleados, su vida íntima es privada desde su divorcio, ninguna mujer le había interesado desde ese entonces hasta hoy que conoció a Lisa, recordaba cada movimiento que hacía en el gimnasio, la gota que deslizaba sobre la apertura de sus senos, negó al estar pensando en ella de esa forma, no mentiría, la deseaba de forma carnal pero también algo de ella hacía que quisiera ser romántico, llevarla a la luna si fuera necesario, no quería esperar al lunes para verla, sentía la necesidad de ver esos ojos grises nuevamente

¿En tan poco tiempo se había vuelto adicto a ella?

Hoy había decidió irse temprano, no estaba lo suficientemente concentrado como para terminar el horario laboral algo que de igual forma hizo desconcertar a sus empleados pero no le tomo importancia, subió a su Cadillac CT6 negro, le tocó un alto y sintió la necesidad de voltear

Su respiración se agitó al verla con un mandil de cuadros entregando a una anciana un ramo de rosas, sonreía, era la primera vez que la veía sonreír genuinamente aún cuando la señora apretaba sus mejillas seguramente diciéndole lo linda que era

Henry decidió estacionar su auto e ir a verla aún no sabía por qué pero no quería irse sin haber saciado su necesidad de su mirada, ella aún seguía distraída con la adulta mayor y no estaba equivocado, estando más cerca escuchaba como le repetía varias veces lo linda y gentil que era

—¿Cómo que busca? – una voz conocida lo sobresalto haciendo que desviará su atención a ella

La rubia lo miraba con diversión como si supiera la respuesta de su propio cuestionamiento

—Un ramo – quiso disimular

Pero era inútil, aquella rubia parecía saber sus intenciones

—¿Para alguien en especial? – aplanó sus labios para contener una risita —. Pregunto para recomendarle algo en específico – Henry entendió la indirecta dándose por vencido

STAY WITH ME ||HENRY CAVILL||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora