Henry sabía que era hora de intervenir de forma contundente y con ese objetivo, Pedro viajó a Nueva York para reunirse con unos colegas. Estaba convencido de que para vencer a un narcisista como Thomas, era fundamental entender su punto débil: la superioridad.
En su mente, Pedro repasaba los patrones de comportamiento de Tom su necesidad constante de control y dominio. Sabía que si lograba desestabilizar esa superioridad, podría tener una oportunidad de salvar a Lisa de las garras de su esposo abusivo
—¿Es linda? – preguntó Rachel
—Si, pero no le digas a su esposo que lo admiti – hizo una mueca de susto
—De su esposo no es de quién debes cuidarte – bufó cruzándose de brazos
—Nena, te apuesto lo que quieras a qué tú también caerás flechada, además, te llevarías muy bien con ella es igual que tú
—¿Hermosa y carismática? – movió su cabello en un gesto vanidoso
—Insolente y desquiciante diría yo
—¡Ains! ¡Eres un idiota! – le dió un leve golpe en el hombro —. ¿Y por qué no se puede reunir con Lisa al igual que Harret?
—Porque tengo que llevar todo el armamento para convencerlos – sonrió divertido —. Los Zacharius ya no litigan, Mike por ser socio nominal y Euphemia bueno... Es una larga historia
—No entiendo ¿No sería mejor contratar a alguien de su firma o que tú lleves su caso?
—Creeme, un narcisista como Thomas es capaz de todo, de hacerle la vida miserable a Lisa con tal de no verla feliz y ellos son los mejores para no dejar cabos sueltos, si hacemos que la mejor firma del país la respalde, prácticamente la volveria intocable
—Eso sería muy bueno, más si quiere entrar a las cuestiones empresariales
—Asi es lindura – le pico su nariz —. Por eso te necesito, son duros de convencer y algo que Euphemia valora demasiado es la amistad
—¿Pretendes que la manipule? – preguntó sorprendida
—A ella no directamente, a su mejor amiga, es su punto débil, Euphi es una maldita pero siempre hace lo que su Minion dice
Rachel soltó una risita
—Tarado – le dio otro golpe —. Yo también soy chiquita – se cruzó de brazos
—Es cierto, ya dicen que las chiquitas son peligrosas, solo mira como me tienes – se inclinó a ella para darle un beso tierno
—Espera, tengo un buen sonido para este momento
La rubia saco su teléfono e hizo sonar un látigo
—Hija de p... – bufó exasperado para luego echarse a reír con ella
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STAY WITH ME ||HENRY CAVILL||
RandomElla pensaba que tenía un buen matrimonio. Él solo quiere tenerla a ella.