La fuerza del destino

Capítulo 14

Capitulo 14

Flash back

-Señorita marlow, dígame ¿ha pensado en lo que le dije la primera vez que nos conocimos?-le dijo el duque sin rodeos, mientras Terry se había ausentado un momento de la mesa.

-si señor-murmuró tímidamente Susana.

-y bien ¿Cuánto es lo que desea?

-Nada señor-dijo firmemente Susana.

-¿eso quiere decir que aun pretende atar a mi hijo a usted sabiendo que no la ama?

-no necesita recordármelo señor, pero no se preocupe solo deme tiempo para poder hablar con su hijo...

Fin del flash back

Ya se le habían terminado las excusas a Susana para posponer lo que por tanto tiempo había deseado: el anuncio de su compromiso. Terry le había dicho una y otra vez cuando quería que se anunciara su boda, sabía perfectamente que el cambio tan precipitado de Terry se debía a que una vez más Candy se había alejado.

- ¿En qué piensas?-repentinamente la voz de su aun no oficial novio, la sacó de sus pensamientos.

-Es solo que... Terry sigue insistiéndome acerca del anuncio de nuestro compromiso, y yo ya no sé qué excusas inventar...-murmuró Susana cabizbaja.

-No te preocupes amor mío-le dijo dulcemente el moreno-solo estoy esperando a reunir un poco más de dinero para así darte la vida que mereces y poder gritar al mundo lo mucho que te amo.

Susana sabia poco de aquel hombre que en poco tiempo le robó el corazón, su instinto le decía que el hombre que estaba a su lado no era una persona común y corriente, pues las ropas que vestía y el auto que conducía no eran del hijo de personas como ella y las personas del barrio en que vivía, así que temerosa de saber más, no hacia preguntas solo asentía en silencio.

-Después de todo no es el inútil que pensé-dijo Archie revisando unos documentos que había entregado Neil- ¿no te parece extraño que te haya pedido empleo Albert?

-Es cierto-decía el patriarca de la familia Andrey, recordando que un par de meses atrás Neil había acudido a pedirle empleo, pidiéndole no le comentara nada a nadie incluida a la tía abuela-tal vez esté cambiando al igual que Elisa.

-No son más que artimañas, si Elisa de verdad hubiese cambiado nos diría en donde se encuentra Candy-dijo muy molesto Archie.

-No lo hace porque así se lo pidió Candy, además no puedes negar que es muy amable de su parte entregarnos las cartas que Candy nos envía, al igual que hace llegar nuestras cartas.

-En eso tienes razón Albert, pero aun así no me fio de ese par.

Candy se encontraba sentada en el alfeizar de la ventana mirando como aquella ligera lluvia no dejaba de caer, suspiró fuertemente pues el día anterior había planeado dar un paseo por los alrededores de la hermosa casa de campo de lady Sandstrom. Habían llegado a Lakeland un par de días atrás, el clima era relativamente bueno, pues el calor era bochornoso el día de su llegada.

-No te preocupes Candice, este clima siempre es impredecible, te aseguro que mañana amanecerá mejor-le dijo lady Sandstrom ofreciéndole una taza de té.

-Ahora entiendo por qué le gusta estar tanto aquí, el paisaje es tan hermoso, la tranquilidad que aquí se respira, dan ganas de no irse nunca de aquí-dijo Candy suspirando nuevamente.

-Lo mismo decía Terry cuando solía venir aquí, al igual que Richard-dijo lady Sandstrom, mirando una acuarela que se suponía tenía que estar terminada-Candy, deberías de terminar esa acuarela, en lugar de estar mirando la lluvia caer.