⟳008

1.8K 176 0
                                    

Sus primeros años en Estados Unidos fueron demasiados duros, pero eventualmente pudo acostumbrarse y hacerse un lugar en el mundo de los negocios ilegales. ¿Quién podía culparlo? Quiso huír de ese estilo de vida pero era lo único que su padre le había enseñado, para que lo había preparado desde que era un niñito de la calle que había visto mucho pero que no sabía casi nada. En sus años de vida hasta ahora descubrió que tenía hobbies como la música o el deporte, cosas para las que era muy bueno, pero nada se veía como un futuro seguro y estable.

Por otro lado, las cosas no podían esconderse para siempre y menos en un negocio como ese, las paredes escuchaban y los chismes volaban en el aire, Jaehyun lo sabía muy bien, por eso no fue sorpresa para él que Doyoung se enterara de su ubicación en Estados Unidos. Tal vez pudo influir mucho su posición en el negocio y su situación de crecimiento rápido, o simplemente no, pero Doyoung no hizo nada en su contra, solo pensaba que era mejor mantener a Jung lejos de él, así que solo guardaría la información hasta que le sea útil en el momento adecuado.

Los años habían pasado, Jaehyun ya no era un niño, ahora estaba cerca de sus treinta años y aún no sabía cómo hacer pagar a su herma-... A Doyoung. Realmente pensó en rendirse y dejar todo en el pasado, listo para empezar una vida, pero la respuesta negativa llegó casi caída del cielo, un día de verano, justo cuando su hermanito entró emocionado a su oficina con una gran noticia.

― Kim Doyoung tiene un omega. ― al principio, Jaehyun frunció el ceño confundido ¿Por qué tendría que importarle la vida de ese infeliz? Pero luego, cuando Jaemin le dio un zape lo vio más claro y pudo entenderlo.

― ¿Cómo lo sabes? 

Él lo escuchó hablando con sus amigos. ― Jaehyun suspiró con una pequeña sonrisa empezando a formarce en su rostro.

― ¿Sabes lo que significa eso, mi pequeño Nana? ― el castaño asintió. ― Es el momento de volver a Corea.

―Estuve esperando esto por mucho tiempo, hermano. Lo tengo todo listo, yo me encargo. ― y luego de eso, Jaemin salió de la habitación, dispuesto a hacer un par de llamadas para empezar.

El castaño fue el primero en viajar para encargarse de amueblar la nueva casa en la que vivirían y equiparla con lo necesario porque estarían ahí por un buen tiempo. Para Jaehyun, la mudanza no fue tan fácil, especialmente por el tema del trabajo, su imperio creció en poco tiempo y tenía que soldar algunos tratos con sus socios, las cosas serían difíciles ahora que él estaría en Corea, pero no imposible.

Jung estuvo preparándose mentalmente mucho tiempo para ese momento, pero cuando bajaba del avión luego de aterrizar en Corea, se dio cuenta que las heridas aún estaban abiertas en el fondo de sí mismo. Su corazón latía con fuerza, tanto que su pecho dolía, Corea no era un lugar que le trajera necesariamente buenos recuerdos. ¿Importaba? No realmente, como muchas veces lo hizo, solo tuvo que tragarse los pensamientos raros de su mente, y caminar hasta donde Jaemin se encontraba, para dirigirlo a lo que sería su nuevo hogar.

Desde que Jaehyun descubrió al verdadero Doyoung, se dio cuenta de que este era la persona más egoísta y cruel que solo pensaba en sí mismo, jamás se imaginó que este podría experimentar un sentimiento humano positivo como lo era enomararse, por e...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Desde que Jaehyun descubrió al verdadero Doyoung, se dio cuenta de que este era la persona más egoísta y cruel que solo pensaba en sí mismo, jamás se imaginó que este podría experimentar un sentimiento humano positivo como lo era enomararse, por eso no le creyó a Nana cuando él llegó con el rostro neutral a contarle que había visto a Kim Doyoung con el que aparentemente era su pareja, y que estaba total y locamente enamorado de aquél omega.

Cuando lo vio con sus propios ojos no pudo evitar sonreír con gracia.

Doyoung parecía un tonto moviéndose de un lado a otro, pendiente de lo que su omega y pequeño niño querían, mirando al castaño con ojos de amor, sonriendo a todo lo que él decía. Jaehyun soltó una risa.

El amor te ponía como el mayor de los imbéciles , por eso en este negocio no estaba recomendado enamorarse, eso significaba tener una debilidad. Y ahora su hermanito tenía dos.

Después del acontecimiento, Jaehyun mandó a sus hombres a seguir de cerca al omega para saber su rutina y luego tener una idea de cómo actuar, fueron días después que decidió acompañarlos personalmente, no supo por qué, no supo cómo, pero ese día su vida cambió por completo. Cuando vio al omega con sus propios ojos, fue que Jaehyun pudo entenderlo... Entendió por qué su hermano estaba locamente enamorado de él.

Físicamente era un omega muy lindo, demasiado bonito para ser real, incluso parecía haber sido esculpido por los mismísimos dioses, pero con el pasar de los días se dio cuenta de que era una buena persona y buen padre también.

Eso no debería importarle, pero lo hacía. 

― Lee Taeyong... ― susurró Jaehyun una vez estuvo en la soledad de su habitación, se sintió tan bien saborear ese nombre entre sus labios. Y eso... El repentino interés en el omega de su hermano realmente no estaba en sus planes.

Iba a ser completamente honesto, la idea inicial era atormentar a su hermano por medio de su omega hasta pegarle un tiro en la cabeza frente a Doyoung para que sienta lo que él sintió cuando por su culpa Shim Changmin acabó con la vida de su padre frente a sus ojos, luego se encargaría de acabar con la estabilidad de Doyoung para poder recuperar el imperio que en algún momento tuvo que pertenecerle a él también, pero no podía, por alguna maldita razón la idea del omega muerto le causaba una sensación de disgusto.

Sin querer, se encontró así mismo acompañando a sus hombres todos los días para ver a Lee Taeyong.

No quiso pensarlo de más, no era buena idea pensarlo de más.

Una tarde en casa, decidió hablar con Jaemin para contarle el cambio de planes. Al principio su hermano pareció a punto de lanzarle un golpe en la cabeza para hacerlo recapacitar, pero Jaehyun no quería escucharlo, sabía que su hermano era la voz de su razón pero esta vez no quiso escucharlo. Sin darse cuenta sus labios hablaron:

― Lee Taeyong tiene un hijo pequeño... No más de cinco años ¿Lo sabías? ― con un rostro tan serio y calculador que hasta él mismo se sorprendió.

― No lo sabía. ― soltó Jaemin, gruñendo levemente con los dientes apretados por el enojo.

― Pues yo tampoco, eso es un gran cambio en los planes y lo sabes. No somos buenas personas pero tampoco vamos a dejar a una mocosa sin su padre por la culpa de mi estúpido hermano.

No supo de dónde sacó la fuerza para mentirle a su hermano con tanta naturalidad, la verdad era que en otra ocasión no le hubiese importado si un niño estaba o no en medio de sus planes, su sed de venganza a Kim Doyoung era mucho mayor.

― Bien, sé que sabes lo que haces. ― soltó el castaño mirándolo fijamente, Jung se sentía juzgado. ― Si necesitas algo sabes dónde encontrarme. ― luego se dio media vuelta y caminó hasta su habitación.

Jaemin lo conocía mejor de lo que él mismo se conocía , lo más probable era que él supiera que algo, o alguien, era el causante de ese cambio brusco, pero decidió solo guardar silencio y seguir al pie de la letra las órdenes de Jung como siempre hacía.

Tal vez y solo tal vez debió haber dicho algo en ese momento para evitar todo lo que llegó después.

El amor te ponía tonto... Muy tonto.

 Muy tonto

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mafia 𖦹 𝙅𝘼𝙀𝙔𝙊𝙉𝙂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora